El martes comienza el realojo de las familias de «El Cavero»

El próximo martes, 1 de septiembre, está previsto que empiece el realojo de las 47 familias que hasta ahora habitaban en el asentamiento «El Cavero» en el municipio de Olías del Rey, después de que el Gobierno de Castilla-La Mancha haya aprobado conceder 35.000 euros a la Asociación Socioeducativa Llere para la realización de un Plan Social de Acompañamiento.

Así lo explicó la representante legal de la Asociación Socioeducativa Llere, Mónica Gómez, asociación que va a llevar a cabo este plan de acompañamiento, pues lleva trabajando en el asentamiento desde 1995, cuando las primeras familias ocuparon el edificio propiedad de la Seguridad Social.

Esta actuación, con la que están de acuerdo todas las familias afectadas según aseguró Gómez, llega después de que un juzgado decidiese aplazar el pasado mes de julio el desahucio de este asentamiento, previsto para el próximo 30 de septiembre.

La representante de Llere explicó que aún no saben en qué municipios van a ser realojadas estas 150 personas, aunque el radio de actuación se sitúa en la Mancomunidad de La Sagra, en función de las bolsas de viviendas de cada municipio, pues aún no se sabe si esas casas en las que van a ser realojadas serán sociales. «Primero hay que ver la bolsa de vivienda de la que disponemos por medio de una línea de intervención con la Consejería de Bienestar Social», dijo Gómez, quien añadió que aunque la gran mayoría de las familias tienen recursos y empleo, 15 de ellas perdieron todo en los sucesivos incendios que se produjeron en el asentamiento el pasado mes de junio.

Es por ello que Llere ha pedido a la Consejería que dirige Aurelia Sánchez acelerar los procesos administrativos para que estas familias recuperen la documentación perdida en esos incendios -como el DNI-, para poder establecer contratos de arrendamiento y poder ser realojadas cuanto antes.

Según Mónica Gómez, todos los afectados son conscientes de que se tiene que dar prioridad a las 15 familias que perdieron su vivienda y aunque el resto tiene recursos económicos y «van a pagar su alquiler, su luz y agua, se establecerá un criterio de pago «para ver quién paga más y quién menos en función de sus ingresos».

De igual modo indicó que los 53 menores que vivían en este asentamiento, escolarizados hasta ahora en las localidades de Bargas y Argés, aún no han sido matriculados en ningún centro educativo pues están a la espera de conocer en qué localidad van a residir para hacer el pertinente traslado de expediente escolar.

Ese Plan Social conlleva también apoyar a las familias en su salida de asentamiento y en su adaptación en las nuevas viviendas.