La defensa de Pablo Ibar confía en que se repita el juicio que le condenó a cadena perpetua
El abogado del español presenta una apelación en Florida que denuncia las irregularidades del proceso y la fundamentación de la condena en «las mismas débiles y escasas pruebas» que le tuvieron durante dieciséis años en el corredor de la muerte
Ibar lleva 28 años en prisión condenado por un triple asesinato que dice no haber cometido
Pablo Ibar recurre su veredicto de culpabilidad y su sentencia de cadena perpetua
La defensa de Pablo Ibar —el hispanoestadounidense condenado a cadena perpetua que estuvo durante 16 años en el corredor de la muerte por un triple asesinato perpetrado en Miami en 1994— confía en que prospere su apelación ante las irregularidades de la ultima condena y que se pueda repetir el juicio.
Así lo ha manifestado este miércoles en Madrid Joseph Nascimento, uno de los abogados que consiguió la anulación de la condena a muerte en 2016, por estar basada en «pruebas escasas y débiles» según el Tribunal de Florida. Dos años más tarde Nascimento también le representó en el nuevo juicio que, en 2019 , le condenó a cadena perpetua con las «mismas escasas y débiles pruebas» , según ha explicado, como responsable de los asesinatos de Casimir Sucharsky, dueño de un club nocturno, y las modelos Sharon Anderson y Marie Rogers ocurridos el 26 de junio de 1994.
En una rueda de prensa, Nascimento ha dado a conocer en España el recurso que ha presentado ante el Tribunal de Apelaciones del Cuarto Distrito de Florida contra la sentencia del juez Dennis Bailey. La reclamación se fundamenta en las graves irregularidades que se cometieron durante el desarrollo del juicio que, según ha explicado, deberían obligar a repetir la vista.
Según ha explicado, el 15 de abril presentó los contraargumentos a la posición de la Fiscalía y ahora está a la espera de que se pronuncie el Tribunal sobre la celebración de una nueva vista oral. «Es lo que pedimos, pero no sabemos ni cuándo se pronunciará el tribunal y si finalmente aceptará un nuevo juicio », ha dicho Nascimento. Si finalmente no prosperara la apelación, la defensa todavía tiene varias instancias para reclamar, hasta llegar al Tribunal Supremo de Estados Unidos, lo que «sería una batalla larguísima para Pablo».
Un proceso que tendría que sumar a los 28 años que ya ha pasado en diferentes prisiones estadounidenses desde que en 1994 fue detenido como el presunto autor del triple asesinato, que según ha defendido siempre, no cometió .
El recurso presentado por Nascimento trata de demostrar con 13 argumentos las irregularidades de un juicio que, desde un primer momento, parecía «orientado a seguir manteniendo a Pablo en prisión». «En Estados Unidos es difícil tumbar las declaraciones de culpabilidad —ha explicado el letrado— y a eso se agarra la Fiscalía, argumentando que si se cometieron esos errores son inocuos» y no afectan al veredicto de culpabilidad.
Testigos condicionados
El recurso se fundamenta en tres grandes bloques. El primero, tiene que ver con la declaración del testigo principal, vecino de una de las víctimas. « Argumentamos que la Policía ejerció influencia sobre él . Este hombre declaró haber visto a dos hombres conduciendo el coche de una de las víctimas y que uno de ellos tenía el pelo corto y no iba afeitado».
Al conocer el asesinato, el testigo compartió la información con la Policía, pero no fue hasta veinte días después cuando los agentes acudieron a su casa y le mostraron fotos de seis individuos, pero solo dos de ellos sin afeitar (Pablo Ibar y otra persona). Esas dos fueron las fotografías señaladas por el testigo. Días más tarde, en una ronda de reconocimiento en prisión, de los seis posibles sospechosos, Ibar era el único que ya había aparecido en las fotos iniciales . El testigo le señaló a él, por lo que la defensa argumenta que la Policía orientó su decisión.
«Aquel testigo fue influenciado. No es justo que sólo incluyeran a dos hombres sin afeitar y tampoco lo es que en la rueda de reconocimiento en la cárcel Pablo fuera el único que ese testigo había visto en fotos previamente», argumenta Nascimento. «También supimos en 2017 que al testigo le enseñaron fotos de la escena del crimen antes de las fotos de los sospechosos , pero la Fiscalía ha negado esto siempre», ha añadido.
Una dudosa prueba de ADN
El segundo bloque de las apelaciones está relacionado con el ADN. Una de las pruebas principales es una camiseta que se encontró en la escena del crimen y que la Policía relaciona con Pablo Ibar porque tiene el logotipo de una empresa eléctrica y la madre del español trabajaba en otra empresa del sector.
La camiseta tiene ADN de las tres víctimas y de dos hombres no identificados que no son Pablo Ibar . La prenda ha sido sometida a nueve estudios desde 1994 y no fue hasta la primera apelación cuando la Fiscalía anunció que había encontrado ADN de Ibar.
La defensa puso en duda el hallazgo y denunció una deficiente cadena de custodia, en la que la prueba se pudo contaminar después de estar 24 años en una caja de cartón junto a pertenencias de Ibar. «El juez no nos dejó argumentar que este laboratorio de criminalística ha tenido otros casos de contaminación», ha denunciado el abogado
Antes de aquel análisis, en «todas las ocasiones había salido negativo que el ADN de Pablo estuviera en la camiseta; se encontró cabello que excluía a Pablo. Las áreas de mayor desgaste en las axilas y cuello, donde es más habitual encontrar ADN de la persona que la ha vestido, excluyen a Pablo. En otras áreas encontraron saliva que no es de Pablo. La Fiscalía se ha negado a comprobar el ADN con sus bases de datos . Su argumento ha sido que ninguna de las zonas con ADN lo tiene en calidad suficiente como para compararlo con nadie», ha explicado.
Un juez poco imparcial
Las dudas sobre la imparcialidad del juez , y de otras instancias judiciales implicadas, es el tercer bloque de irregularidades que denuncia la defensa. En su momento presentaron una petición para retirar del caso al juez Dennis Bailey, ya que su esposa en aquellos momentos (ahora está divorciado) fue fiscal del caso en una fase anterior. También, el fiscal que participó en el juicio que le condenó a muerte, que ya estaba jubilado, volvió de su retiro para retomar la acusación. Además, tenía una relación personal directa con el juez, y había sido su jefe al inicio del procedimiento.
La parcialidad del magistrado se puso en evidencia desde la elección de los miembros del jurado , según ha explicado el abogado, cuando «en prácticamente todos los casos en los que identificamos un candidato no idóneo para el juicio, el juez no estuvo de acuerdo con nosotros, pero con los rechazos de la Fiscalía, el juez no tuvo problema».
También ha denunciado presiones al jurado durante el juicio y en la fase de deliberación, que fue particularmente larga. «Más tarde supimos que al menos había cuatro personas que no estaban dispuestas a condenar a Pablo », ha comentado.
Incluso uno de ellos cambió su decisión unas horas después de darse el veredicto . La decisión se comunicó el sábado por la mañana y uno de los miembros del jurado, el lunes siguiente llamó al juez para retractarse y denunciar las presiones que le habían llevado a aceptar la culpabilidad. La decisión del juez fue retirar al jurado y seguir con el veredicto de culpabilidad.
Campaña de 'crowdfuning'
En espera de la decisión del Tribunal de Apelación la Asociación Pablo Ibar-Juicio Justo ha anunciado el inicio de una campaña de 'crowdfunding ' para costear la defensa de Ibar. « Tenemos un presupuesto para la defensa de 200.000 dólares (unos 165.000 euros) y necesitamos la colaboración de la ciudadanía», ha recalcado el portavoz de la asociación Andrés Krakenberger.
Hasta ahora la asociación había contado con la ayuda del Estado español y del Gobierno vasco a través de las partidas que tienen habilitadas para auxiliar a los españoles condenados a muerte en cualquier país del mundo. Sin embargo, tras conseguir que se anulara la condena, la financiación del procedimiento es totalmente privada.
Si finalmente consiguen la repetición del juicio confían en no coincidir con los mismos actores por parte del magistratura y la fiscalía. E l juez Dennis Bailey, que fue reprendido por el Supremo de Florida por su trato vejatorio hacia unos abogados defensores , no fue reelegido en las anteriores elecciones por lo que ya no continua al frente del juzgado. Ademñas, el fiscal se ha retirado definitivamente y sería muy extraño que volviera para un nuevo juicio.
Pablo Ibar , después de 28 años en la cárcel , más de la mitad de ellos en el corredor de la muerte, mantiene la entereza y «una salud mental extraordinaria» según ha dicho su abogado. «Saber que mucha gente le apoya le da mucha fuerza», ha añadido. Nascimento también ha agradecido el apoyo recibido desde España y se ha mostrado convencido que sin ese respaldo ciudadano «hoy no estaría vivo pues habría sido ejecutado por el Estado de Florida hace algunos años».
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