Francisco, con sus hijos en una fotografía familiar entrañable
Francisco, con sus hijos en una fotografía familiar entrañable - ABC

«Francisco era una referencia para los amantes del ciclismo que vienen a Guadalcanal»

El Ayuntamiento de la localidad propondrá que la prueba que organizaba Francisco Cabeza lleve su nombre

SEVILLA Actualizado: Guardar
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«Ha sido un palo tremendo. Este pueblo es muy pequeño y todos nos conocemos. Pero es que además Francisco era una referencia para los amantes del ciclismo que vienen a nuestra localidad a practicar ese deporte». El alcalde de Guadalcanal, Manuel Casaus, digería ayer como podía la noticia del fallecimiento de Francisco Javier Cabeza, de 37 años, quien moría el domingo tras ser arrollado por un turismo en la avenida Montesierra de la capital. El conductor, de 27 años, dio positivo en alcohol y en consumo de drogas. Tras ser detenido y puesto a disposición judicial, el investigado fue enviado a prisión por delitos contra la seguridad vial y homicidio imprudente. «No sólo ha sido su muerte, sino también la forma en la que se ha producido, tan injusta.

Un hombre joven, con dos niños pequeños...Es terrible».

El accidente ocurría cerca de las 8.30 de la mañana en las inmediaciones de un cruce de peatones de la citada vía. La víctima había salido a entrenar temprano, como hacen muchos aficionados a la bicicleta todos los fines de semana, cuando en su camino se cruzó un coche conducido por un joven que venía de una noche de fiesta, de consumo de alcohol y drogas.

Accidente en Montesierra
Accidente en Montesierra - ABC

La Policía Local investiga qué ocurrió para que el conductor arrollara al ciclista en una recta, con dos carriles por sentido, con buena visibilidad y poco tráfico. Una imprudencia al volante parece estar detrás de la tragedia. Lo que sí está confirmado es que el detenido duplicaba la tasa de alcohol permitida en sangre.

En un primer momento, el ciclista pudo ser estabilizado por los servicios sanitarios en el lugar del accidente y desde allí fue trasladado al hospital. Francisco Javier permaneció varias horas en muerte cerebral en el Virgen del Rocío. Durante ese tiempo, el equipo médico pudo extraerle sus órganos, que han servido para una donación múltiple, la cual ha sido posible gracias al expreso deseo de la familia.

El fallecido, casado y con dos hijos pequeños, vivía con su familia en Sevilla pero mantenía vivos los lazos con su pueblo. «Venía en vacaciones, los fines de semana. Nunca se alejó de Guadalcanal», señalaba ayer Casaus, quien recuerda también el año que estuvo ejerciendo como profesor de matemáticas en su localidad natal. En Guadalcanal vive una hermana de Francisco Javier, que regenta una tienda, y su padre, que ha sido trabajador del Ayuntamiento, comenzaba a recibir ayer las condolencias de una localidad en estado de «shock».

El alma de «La Capitana»

El fallecido era el alma de la prueba ciclista «La Capitana», que cumplió el pasado mes de abril su séptima edición. Este evento abre el circuito provincial de Sevilla XCM, siendo valedera para el ranking andaluz.

Francisco Javier, que pertenecía al equipo Fernando Torres Probike, «estaba trabajando para que la prueba fuera puntuable a nivel nacional. Eso hubiera servido para poner a Guadalcanal en el escaparate nacional», se lamenta el alcalde, quien adelantó a ABC que van a proponer que «La Capitana» sea rebautizada como Memorial Francisco Javier Cabeza, en «homenaje a la persona que tanto trabajó por esa prueba».

Ese deseo de que la prueba que alumbró lleve para siempre su nombre también lo comparte el exalcalde de la localidad, Jesús Manuel Martínez Nogales, quien ayer recordaba el empeño personal que puso Francisco para que saliera hacia delante una cita deportiva que se convirtió en pocos años en ineludible. «Quería que hiciéramos una ruta con el nombre de “La Capitana”, por ser uno de los puntos más altos de la provincia de Sevilla, que discurriese por cinco pueblos de Extremadura y Andalucía para unirlos a través de la bici. Él fue el gran artífice y organizador de la carrera, involucrando a federaciones y clubes de toda España. Si en la primera ocasión fueron 200 ciclistas, en las más populosas se congregaban en Guadalcanal más de 1.500 personas aficionadas». A las tres de la tarde de ayer llegaban los restos mortales al tanatorio de Camas y a las seis se oficiaba el responso previo a su incineración.

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