El enfado del padre de Marta del Castillo por el violador fugitivo: «Resulta que estaba disfrutando de permisos...»
Antonio del Castillo exige «que el juez de vigilancia penitenciaria se responsabilice de lo que haga» el asesino y violador que no volvió a una cárcel cántabra
Antonio del Castillo, el padre de Marta , la joven sevillana desaparecida y asesinada en enero de 2009, se ha mostrado preocupado por la huida de Guillermo Fernández Bueno , un peligroso preso fugado de la cárcel cántabra del Dueso que no regresó al centro penitenciario el pasado día 15 tras disfrutar de un permiso de salida de siete días.
El padre de Marta del Castillo he retuiteado el mensaje de la Policía Nacional en el que se pide la colaboración ciudadana para encontrar a Fernández Bueno, un «violador y asesino» condenado a 25 años y que debía cumplir su pena hasta 2026. Antonio del Castillo no sólo ha reenviado esta información, sino que ha aprovechado para exigir que se depuren responsabilidades en el caso de que el reo huído reincida durante este tiempo.
«Buscan a un asesino violador, resulta que estaba disfrutando de permisos. Ahora que el juez de vigilancia penitenciaria se responsabilice de lo que haga», ha escrito el padre de la joven sevillana, defensor del mantenimiento de la prisión permamente revisable.
Buscan a un asesino violador, resulta que estaba disfrutando de permisos. Ahora que el juez de vigilancia penitenciaria se responsabilice de lo que haga. pic.twitter.com/c62NKGCYFo
— Antonio del Castillo (@kastillo62) 25 de julio de 2018
La ley, aprobada hace tres años e inmersa desde finales de 2017 en un proceso para su derogación, prevé la prisión permanente revisable para, entre otros casos, el asesinato de una persona menor de dieciséis años y el asesinato cometido tras la comisión de un delito contra la libertad sexual.
Otros de los impulsores de la plataforma que lucha porque no se derogue la ley es Juan José Cortés , el padre de la niña Mari Luz, que murió a manos de Santiago del Valle, un condenado por pederastia que por una cadena de errores judiciales se encontraba libre cuando debía estar en la cárcel en el momento en el que agredió sexualmente y asesinó a la pequeña de Huelva.
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