El Real Madrid se supera a sí mismo

El Real Madrid es un cohete a propulsión. Acaba de conseguir su decimonovena victoria consecutiva superando la marca del Barcelona de Rijkaard. En esa marcha irrefrenable, los blancos han marcado 71 goles, con una media de 3,73 tantos por partido (lo nunca visto) y ha recibido solo nueve goles, a 0,47 por encuentro. De estos 19 partidos dejó su portería a cero en 11 y en los últimos seis encuentros solo ha recibido un gol, en Málaga (1-2).

Los de Ancelotti no pierden desde el 16 de septiembre y llevan 84 días sin perder. Además, son los mejores en la Champions pues han acabado la fase de grupos con todos los partidos ganados: seis de seis, con 16 goles a favor y dos en contra.

Solo en la segunda temporada de Mou el equipo acabó con unos registros similares. La temporada pasada, la de la Décima, también fue peor que esta pues los blancos consiguieron cinco victorias y un empate.

Ahora, el Madrid se impone otro récord: el de triunfos consecutivos mundiales, que ostenta el Curitiba. El club brasileño lo logró en el año 2011 y figura en el Libro Guinnes con una racha de 24 victorias. Las vallas que separan al Real Madrid del récord serán: Almería (el próximo viernes en Los Juegos del Mediterráneo), las semifinales e hipotética final del Mundialito, Valencia en Mestalla, el partido de ida de los octavos de Copa del Rey (lo más probable es que sea ante el Atlético en el Calderón), y el Español en el Bernabéu. Muy difícil, pero con el nivel que está mostrando el equipo no es imposible.

Tres han sido los factores principales en los que se ha basado Ancelotti para la actual racha: el sistema defensivo, el orden del medio campo representado por Kroos, y el continuo maná de goles que representa Cristiano Ronaldo, que no cesa. Pormenorizando, estas fueron las claves:

La pareja de centrales: Pepe y Ramos

Piezas fundamentales en el esquema de Ancelotti. De su estado de forma depende todo el movimiento coral del equipo. Sin tanto músculo como en anteriores temporadas, a Ancelotti solo le quedaba una, mandar a todas sus huestes a presionar arriba, a la salida del balón contrario. Es algo que no se puede hacer si los centrales no están rápidos para cortar los balones largos de los rivales. En ese aspecto tanto Pepe como Sergio Ramos están mostrando una regularidad loable. Por otro lado, el talón de Aquiles que el equipo mostró durante ciertos partidos: la debilidad defensiva en las jugadas a balón parado, ha sido cortada de raíz en los últimos encuentros. Más concentración y seriedad en el primer palo y constancia en la marca han sido fundamentales. Pepe ha jugado 900 minutos en diez partidos. Se perdió tres por lesión pero cuando ha salido mostró un gran nivel. Ramos jugó su partido número 300 en la decimoctava victoria del equipo, ante el Celta (3-0), e hizo su gol número 50 como madridista frente al Rayo. Solo se perdió dos partidos por una lesión en el sóleo (Levante y Liverpool en Anfield).

La fábrica del fútbol: Kroos

Si con la marcha de Xabi Alonso había alguna duda sobre el funcionamiento de la máquina de fútbol blanco, se disipó con los primeros minutos de Toni Kroos. Imperial, elegante, sutil, sin apenas fallos, el alemán se ha hecho imprescindible, no solo por su labor defensiva que, sin ser su fuerte es importante (es el que más corre del equipo), sino por su facilidad para tocar y salir de primera con el balón controlado, algo esencial en el juego del Madrid.

El martillo pilón: Cristiano Ronaldo

Ya no hay adjetivos para el delantero portugués. Cristiano Ronaldo es el futbolista madridista que más minutos ha jugado en esta serie invicta (el 87 por ciento). Ancelotti se ha apoyado en él para conseguir este récord: 26 tantos (32 por ciento del total del equipo) y nueve pases de gol (máximo asistente del Madrid). Y, de camino, récord tras récord: ha sido el más rápido en llegar a los 200 goles en Liga (178 partidos), el que más hat-tricks ha firmado (23), superó a Raúl (71) con 72 goles en Champions y cerca de ser el máximo goleador del torneo.