Un aficionado al pilotaje de aeronaves, el 'artesano' de los drones submarinos para narcos

Esto es lo que al menos han concluido los agentes de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional de Algeciras que les han seguido la pista durante más de un año y los detenían el pasado mes de junio en el marco de la operación 'Kraken'. Una investigación que ha terminado, como ya se informó este lunes, con ocho personas detenidas en diferentes localidades de Cádiz, Málaga y Barcelona por los presuntos delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.

Y en este y otros talleres además de hacer los clásicos dobles fondos, tanto en coches como en otro tipo de vehículos, estaban perfeccionando drones y tres minisubmarinos no tripulados que podían llegar a cargar hasta 200 kilos de droga.

Se les conoce como UUV (Unmanned Underwater Vehicle) y según apuntó el delegado del Gobierno de Andalucía, Pedro Fernández, se encontraban ultimando uno de ellos que pensaban usar para transportar «importantes cantidades de cocaína».

Estos aparatos pueden llegar a tener hasta 50 kilómetros de autonomía (la distancia entre el Estrecho y la costa gaditana son unos 15 kilómetros) y además son de fácil manejo a través de GPS y una app desde también mucha distancia por lo que es más complicado pillar a su piloto ya que puede estar escondido en cualquier lado.

Según constataron también los investigadores la banda estaba empezando ya a ser conocida entre redes extranjeras que se dedican en sus países y Centroeuropa a traficar con el hachís y la cocaína que vienen a buscar a la costa gaditana. Entre ellas, las conocidas como mocro mafia, redes de delincuentes de origen marroquí que se dedican al narcotráfico y a los ajustes de cuentas. Por ello y, como aseguran, tuvieron «multitud de visitas» durante el tiempo que se dedicaron a estos negocios en los que, seguramente, acordaban los pedidos y sus precios.

Como también se ha destacado, se trata de la primera ocasión en la que se han intervenido este tipo de vehículos, que operan bajo el agua sin tripulación a bordo. En concreto han sido incautados tres. Dos de ellos que estaban aún en fase de fabricación y otro que estaba ya prácticamente terminado que era el que supuestamente iba a acabar en manos de unos narcos franceses

La investigación comenzó en abril del año pasado cuando los agentes constataron que se habían incrementado el número de intervenciones por drones que transportaban droga en el Estrecho. Y así y bajo la supervisión de la Fiscalía de Algeciras y del juzgado de Instrucción 1 de San Roque comenzaron las pesquisas que les llevó hasta Castellar y otras localizaciones donde los supuestos miembros de esta red operaban.

Además, los investigadores detectaron hasta trece vehículos de distinto tipo a los que se les habrían practicado dobles fondos para ocultar y transportar drogas, algunos de ellos fabricados en el interior de remolques y capaces de albergar hasta 800 kilos. Se han intervenido cuatro de estos vehículos, logrando la aprehensión de 145 kilogramos de hachís y 8 de marihuana. En concreto uno de estos transportes fue interceptado cuando se dirigía hacia Dinamarca a bordo de una grúa con la intención de evitar posibles controles policiales, con 218 tabletas de hachís en el interior de una 'caleta'.

El cariz de esta operación toma aún más seriedad al saber también que en este mismo operativo se ha identificado a varios ciudadanos marroquíes y daneses que enviaban desde el sur de España importantes cantidades de hachís para las ya mencionadas mocro mafias.