El tesoro de Troya

Unos académicos trazan un plan para descubrir Troya. Cuando los expertos se burlan de su iniciativa, Schliemann decide hacer realidad su sueño.

Aventuras, amor, peligro y venganza son los principales ingredientes de "El tesoro de Troya", una superproducción europea basada en la historia real de Heinrich Schliemann, un arqueólogo alemán que descubrió diversas civilizaciones griegas en el siglo XIX y cuyas publicaciones contribuyeron a popularizar esta rama del saber.

Con un presupuesto de 8,3 millones de euros, el filme se convirtió en aquel entonces en la producción europea que necesitó un escenario más grande. Y es que, rodada entre Alemania, Croacia y Grecia, la cinta requirió un set de 70 metros de largo para emular las excavaciones de Troya, que 150 obreros tardaron tres meses en construir.

En el apartado interpretativo, destaca el trabajo de su pareja protagonista, integrada por Heino Ferch ("El hundimiento") y una Mélanie Doutey ("La flor del mal"), cuyo conocimiento del alemán era tan limitado que tuvo que recitar sus líneas en inglés. También resulta remarcable la banda sonora, que emula las partituras de Mozart, Haydn, Tschaikowsky y otros compositores de la época.