Unas cartas inéditas del fallecido Alan Rickman revelan que el Snape de Harry Potter no le hacía feliz

Hace ya dos años que murió Alan Rickman, el actor británico conocido sobre todo por su papel de Severus Snape en la saga cinematográfica de Harry Potter, pero ha sido ahora cuando han salido a la luz unas cartas en las que el intérprete desvelaba sus sentimientos, encontrados, al dar vida al profesor de Pociones del niño mago. Un papel que, sin emabrgo, le sirvió para reencontrarse con una de sus grandes amigas, Emma Thompson, con la que ya había coincidido en «Love Actually».

El también actor Neil Pearson ha sacado a subasta varios documentos procedentes del archivo personal de Rickman, y entre ellos han aparecido cartas en las que el británico admite sus dudas y afirma sentirse frustrado con el que, en palabras de la autora J.K. Rowling, era el personaje más complejo de este universo mágico.

De hecho, en 2009, cuando Rickman estaba inmerso en pleno rodaje de la sexta entrega de Harry Potter escribió un texto titulado «Dentro de la cabeza de Snape» en el que expresaba sus diferencias creativas con el director: «Es como si el director David Yates hubiera decidido que esto no es importante en el plan de algunas cosas como, por ejemplo, para atraer a una audiencia juvenil».

Al parecer, sus compañeros de reparto conocían los sentimientos encontrados del actor, que nunca estuvo del todo convencido de participar en la saga de Harry Potter. Desde Daniel Radcliffe hasta el productor que escogió a Rickman para el papel de Snape, David Heyman, le mostraron su apoyo: «Gracias por hacer que "Harry Potter 2" sea todo un éxito. Sé que a veces te sientes frustrado pero, por favor, has de saber que tú eres una parte fundamental de las películas, y eres brillante», le dijo este último.