Una grúa retira los restos de un coche bomba en Bagdad. / REUTERS
MUNDO

El mando militar de EE UU propone una drástica reducción de tropas para 2007

El general Casey aboga por disminuir el contingente en 28.000 soldados

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La visita que el general George W. Casey realizó al jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld, el viernes pasado no fue pura formalidad. El comandante de las fuerzas estadounidenses en Irak llevaba bajo el brazo un plan para disminuir lentamente el número de tropas, lo que puede suponer hasta 28.000 hombres menos a finales de 2007, según publicó ayer The New York Times.

Si el Pentágono da el visto bueno a la propuesta, los recortes podrían empezar en septiembre, aunque más que una retirada de tropas se trataría de no reemplazar los turnos que van cumpliendo, y dejar destacada en Kuwait una brigada en estado de alerta. Ese primer paso afectaría a dos de combate, que generalmente tienen cada una 3.500 hombres. Estados Unidos mantiene actualmente 127.000 soldados en Irak.

La propuesta contempla suprimir entre seis y ocho brigadas para el 14 de diciembre de 2007. Dado que el tamaño de estos destacamentos es irregular, resulta difícil calcular el número exacto al que se reducirían las fuerzas, pero el rotativo neoyorquino estima un máximo de 28.000, lo que dejaría a Estados Unidos con unos 100.000 hombres. Esto supondría también una reducción de sus bases, que pasarían de 69 a 57 para final de este año, y a 11 cuando decline 2007.

Aunque el Pentágono apoye el plan, su cumplimiento dependerá de los progresos que realicen las fuerzas de seguridad iraquíes que Estados Unidos entrena a marchas forzadas para que puedan reemplazar a sus hombres, así como de la evolución de la insurgencia.

Esto explica que ayer el embajador estadounidense se sumase con vehemencia al plan de reconciliación del primer ministro Nuri al-Maliki. «Apremio a todos los insurgentes a que depongan las armas y se unan al proceso político del nuevo Irak», declaró Zalmay Khalilzad en Bagdad. «El proceso de reconciliación será difícil de implementar a corto plazo, pero en el largo recorrido es el movimiento estratégico correcto».

Denuncias

No hubo ninguna mención a los escuadrones chiíes que anidan entre las nuevas fuerzas iraquíes para tomarse la justicia por su mano con la minoría suní, antes en el poder, a la que ven detrás de los grupos rebeldes. La población denuncia frecuentemente que sus asesinos son patrullas oficiales que llegan de noche en medio del toque de queda y se llevan a sus hombres sin explicación alguna, para no devolverlos nunca.

Un ejemplo de ello es el caso del abogado de Sadam Husein asesinado la semana pasada. Su esposa declaró que quienes se lo llevaron vestían uniformes de la Policía e incluso mostraron sus identificaciones cuando se les requirió. Estas prácticas han llevado a EE UU a cambiar los uniformes con la teoría de que muchos de ellos han sido robados.

Si bien la reducción de tropas propuesta es bastante modesta, supera las bajas expectativas de los analistas. De acuerdo con el plan inicial, su puesta en vigor comenzaría dos meses antes de las elecciones legislativas de noviembre, en las que el Partido Republicano en el poder ve su victoria estrechamente unida a la capacidad del Gobierno para demostrar que tiene un plan de salida de Irak. El grueso de las reducciones se produciría durante la campaña presidencial de 2008, en la que se elegirá un sucesor para George W. Bush.