ENSEÑAR. La educación de los pequeños es una labor llena de trabajo.
Jerez

El país de las maravillas

La guardería Chavalín cumple 25 años de trabajo con decenas de pequeños que aprenden a vivir entre juegos

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Pocos, muy pocos, por no decir escasos, son los centros dedicados a la educación Infantil, las guarderías, que han logrado sobrevivir más de 25 años en la ciudad. Los problemas derivados de un descenso en la tasa de natalidad dentro de la población jerezana (que parece comenzar a recuperarse en los últimos tiempos) y los no pocos inconvenientes que surgen en torno a cualquier centro de estas características han sido superados con éxito a base de «mucho trabajo, paciencia y dedicación», en palabras de María Victoria Delgado, propietaria y directora del centro.

Cuando esta mujer emprendedora decidió crear la guardería Chavalín en mayo de 1981 nunca llegó a imaginar que ésta se consolidara en el tiempo como uno de los centros más antiguos de la ciudad, donde los pequeños que hasta él acuden comienzan a conocer los secretos de de la vida a través de las palabras y los números. Los alumnos de esta guardería disfrutan aprendiendo en un pequeño oasis que a modo de país de las maravillas hace que las cuidadoras «nos olvidemos de todo lo que ocurre en el mundo real cuando atravesamos las puertas de este centro. Es una forma desconectar con la realidad que vivimos en nuestros hogares o de huir de nuestros problemas cotidianos. Además de educar a estos pequeños y obtener la satisfacción propia de este hecho, trabajar con los niños es, en algunas ocasiones, una especie de terapia que te recuerda lo bello que es vivir».

A lo largo de estos 25 años son muchas las personas que María Victoria ha visto pasar por su guardería. Asimismo, recientemente «estoy recibiendo a hijos de antiguos alumnos míos», un hecho que le llena de orgullo porque «eso quiere decir que estos padres me recuerdan con cariño y que confían ante todo en mí».

Un total de 70 pequeños corretean por las instalaciones ubicadas en la avenida Limonar, en Montealto, una cifra que evidentemente «ha ido aumentando con los años» junto al número de trabajadoras del centro educativo.

Con motivo de este aniversario hace una semana María Victoria reunió en un almuerzo a las profesionales que trabajan a diario con ella, además de a numerosas madres que quisieron celebrar un acontecimiento tan importante para ella.

Todo fue especialmente emotivo para una mujer que incluso en pleno verano tiene abierta la guardería porque «son muchos los padres que trabajan en estas fechas».