ABANDONO. La depuradora de Jédula en el estado actual de abandono que padece. / ANTONIO ROMERO
Sierra

La depuradora de Jédula se encuentra abandonada y nunca ha dado servicio

Hace unos cuatro años se invirtieron más de 600.000 euros en construirla Distintas administraciones colaboraron para desarrollar tres fases

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La Estación Depuradora de Aguas Residuales de la barriada arcense de Jédula fue un proyecto que comenzó a fraguarse hace unos seis años y que a día de hoy aun no ha visto la luz.

Este proyecto no se quedó en la mera redacción del mismo, ni en la intención inicial de llevarlo a cabo, sino que se llegó a ejecutar una buena parte de la obra. De este modo, se llevaron a cabo tres fases que supusieron una inversión de unos 600.000 euros, provenientes de distintas administraciones.

A pesar de lo avanzado del proyecto, nunca se llegó a ejecutar la última de las fases y por ello las instalaciones nunca prestaron ningún tipo de servicio al núcleo urbano de Jédula.

Las malas hierbas y los árboles son los únicos protagonistas de unas instalaciones que se hicieron para ayudar a conservar el medio ambiente y que en la actualidad se encuentran con un chorro de agua que pasa por la misma que no hace más que desprender malos olores y ser el lugar perfecto para la cría de insectos, como los mosquitos. Unos problemas que no resultan más molestos debido a la distancia entre la instalación y el núcleo urbano.

A todo esto, hay que añadir la denuncia que ha realizado un grupo político independiente de la localidad, Aipro, que ha afirmado que en la actualidad podría haber vecinos de Jédula pagando por el concepto de depuración de aguas en sus facturas del servicio de agua, cuando no se está prestando ningún servicio.

Por otro lado, se da la circunstancia de que en el supuesto de que Ebro-Puleva decidiera instalar su planta de Biodiésel en la barriada, no se le podría ofrecer el servicio de depuración de aguas, con lo cual habría que buscar la fórmula para que las aguas residuales propias de una actuación industrial de este tipo no afectaran al entorno natural. Un asunto que seguro que la empresa tiene previsto pero que sería mucho más cómodo con la instalación funcionando.

Por último, otro comentario que se encuentra en la calle es que la ubicación de esta EDAR no sería la más adecuada si finalmente se opta por construir un polígono industrial cerca de los terrenos donde está ubicada actualmente. A pesar de que en su momento se situó lejos del núcleo urbano para evitar molestias.