en localidad argentina de rafaela

Un loro confiesa el nombre de su dueño tras cinco días «detenido» por orden judicial

El animal, llamado 'Pepo', desapareció el jueves de su percha en el patio de la casa de sus dueños, pero fue encontrado por otra familia

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El loro "Pepo" estuvo cinco días "detenido" por orden judicial en la ciudad argentina de Rafaela hasta que "confesó" la identidad de su dueño, con lo que se ha logrado dirimir una disputa por la posesión del ave, según ha informado hoy un diario local. Después de sucesivos "interrogatorios" en una comisaría de policía, el pájaro terminó por llamar a "Jorge", en alusión a Jorge Machado, quien junto con su esposa había denunciado el robo del que consideran "el tercer hijo de la pareja", ha apuntado el diario La Capital según el testimonio del dueño de la mascota.

"Pepo" desapareció el jueves pasado de la percha que ocupaba en el patio de la casa de los Machado, que emprendieron una intensa búsqueda hasta que los hijos del matrimonio lo hallaron en manos de la familia Vega, que vive a unos cien metros de ellos. Pero los Vega se negaron a devolver la mascota con el argumento de que habían hallado a "Pepo" mucho antes de su desaparición, cuando regresaban de un paseo a Rafaela, a 530 kilómetros de Buenos Aires. Estalló así una disputa entre ambas familias que puso al loro "en un evidente estado de shock" que le impidió identificar a su verdadero dueño, según Machado.

Éste ha referido que, al fracasar la "mediación" de una patrulla policial, presentó una denuncia por robo que quedó a cargo del juez Osvaldo Carlos, quien decidió que el loro pasara "unos días en la comisaría" hasta que "confesara" la identidad de su dueño. Machado señala que aportó como pruebas a su favor el hecho de que "Pepo" sabe cantar la marcha del San Lorenzo, club de fútbol del que es hincha, y también la popular canción "Zapatos rotos". Pero el loro se mantuvo mudo durante cinco días hasta que llamó a su dueño por su nombre, con lo que finalmente se ha resuelto la controversia.

El periódico destaca que los policías "se encariñaron tanto" con la mascota que la consideraban como "un miembro más" de la comisaría y le habían asignado "un guardia especial para que verificara si en algún momento emitía alguna palabra que identificara su origen". "'Pepo' es muy inteligente y compañero, sabe la canción de la hinchada de San Lorenzo, pero es difícil que la cante ahora porque al equipo le va muy mal" en el torneo de la liga de primera división, asegura Machado.