Derrota del Chiclana ante un rival muy necesitado

El Chiclana volvió a perder en casa dando una mala imagen, ante un rival muy necesitado que se agarró a la última oportunidad que tenía para seguir en Tercera, y no la desaprovechó, por lo que podrá soñar una jornada más por la salvación.

El Bollullos salió más metido en el encuentro, aunque fueron los locales los que tuvieron las mejores oportunidades en el minuto 2, con un buen pase de Arteaga a Salamanca que el delantero no supo materializar en una vaselina que despejó el portero Souza, y el propio Arteaga un minuto después, en un rechace de un corner sacado por Lupi, aunque finalmente la defensa onubense despejó el peligro.

Desde ese momento, los visitantes tomaron el control del partido ante la desidia de los chiclaneros. Así, en el minuto 19, en la primera ocasión clara del Bollullos, un buen contragolpe conducido por Bomba terminó en los pies de Mario que de perfecta vaselina batió a un Palacios que nada pudo hacer.

El Bollullos sabía que tenía el partido en sus manos y que jugaba ante un rival que no ofrecía ninguna resistencia, por lo que en el minuto 31, otro buen contragolpe de Bomba y Mario, que volvieron locos a los defensas locales, terminó en un pase de la muerte a Guti que, incomprensiblemente, mandó por encima del larguero.

La segunda parte comenzó igual, a pesar de los cambios del Chiclana, que no sirvieron de revulsivo hasta el final. Por ello, a los 52 minutos, otro de esos contragolpes de Mario y Bomba acabó en los pies de Schuster que en el borde del área cedía a Guti, quien colocaba de disparo raso en el primer palo un balón que se convertía en el 0-2.

Desde ese momento, el Bollullos se dedicó a dosificar el resultado y el Chiclana despertó. Comandados por Sotelo, el pequeño jugador realizó un espectacular regate para colocar el balón en el palo. Así, llegaba el minuto 79 de partido cuando una falta sacada por Sotelo fue mal despejada por Iván Souza quedando el balón muerto en el área chica, donde Arteaga remachó al fondo de las mallas.

Fue entonces cuando el equipo reaccionó y se fue hacia delante. Todo ello a pesar de la expulsión de Arteaga en el minuto 81 por agredir a un contrario, dejando a su equipo con uno menos, al igual que el Bollullos, ya que en la misma tangana producida a raíz de una fuerte entrada de David, perdió al central.

Esto fue el preludio de lo que sería el 2-2. Un buen pase de Julio por banda derecha no fue rematado por Salamanca, pero otro mal despeje del meta visitante dejó el balón en los pies del delantero granadino que hacía su decimotercer gol de la temporada.

Pero solo fue un espejismo ya que en la jugada siguiente, el enésimo contragolpe del Bollullos, un perfecto taconazo de Mario dejó el balón a Bomba que lo colocaba en las mallas.

De ahí al final, el Chiclana lo intentó con disparos lejanos de Feito y Galán, de falta, que el meta bollullero, esta vez sí, despejaba a corner. En uno de ello, ya en el descuento, Sotelo remató de cabeza pero un defensa consiguió despejar bajo palos esfumándose la última oportunidad de un equipo que, gracias a los regalos de una defensa permisiva, seguirá siendo el equipo más goleado de toda la categoría con 53 goles en contra.