Economia

La inflación se eleva al 4,2% en enero, la tasa más alta en nueve años

El nuevo repunte de los carburantes, las subidas de los recibos de la luz y el gas y el transporte, entre las principales causas del fuerte incremento Ni el Gobierno ni los expertos habían previsto un alza notable del índice de precios

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La inflación se disparó en enero en España hasta el 4,2%, según el indicador adelantado. Esta cifra supone una notable aceleración de cinco décimas, ya que el año pasado cerró con una tasa interanual del 3,7%. Se trata de la tasa más alta registrada desde enero de 1997 y el primer principio de año que registra un ascenso de los precios desde 2001. No se conocen los detalles, pero todo apunta a que el nuevo repunte de los carburantes se sumó a las tradicionales alzas de comienzos de año -suministros como el gas y la electricidad, servicios como el transporte urbano e interurbano-, que en esta ocasión han sido de mayor calado.

Por unas razones o por otras, el impacto del crudo caro se está trasladando a otros precios. La tarifa eléctrica acumula desfases, y ya empieza a reconocer el coste del gas que queman las centrales de ciclo combinado. Ni el Gobierno ni los expertos habían previsto tan notable subida del índice de precios -algunos analistas habían adelantado que podría llegar al 4%-, de modo que el indicador supone una desagradable sorpresa para todos.

Diferencias

El dato no es definitivo sino una aproximación, generalmente certera, que elabora el Instituto Nacional de Estadística con criterios que son similares para todos los países europeos (de ahí que se denomine IPC armonizado). Las diferencias con la evolución del IPC nacional suelen ser mínimas, de una décima hacia arriba o hacia abajo, aunque en algún caso han llegado a ser de dos décimas. Un aumento del 4,2% en el IPC anual -si se confirma- no se había producido en España desde 1997 y para encontrar una tasa más elevada hay que remontarse al 4,3% registrado en 1995.

La preocupación por tan fuerte aumento se extendió desde las fuerzas políticas hasta los consumidores, pasando por los agentes sociales. La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) ha encendido las alarmas porque sospecha que el aumento de enero es consecuencia del encarecimiento de una serie de servicios básicos con un peso muy significativo en el gasto de los hogares.

Puesto que los precios de las prendas de vestir, el calzado y el menaje resultaron más bajos gracias a la tradicional época de rebajas, que este año ha presentado recortes muy significativos, la asociación de consumidores considera que las alzas quedaron en cierto modo enmascaradas por la evolución de unos precios que volverán a su nivel con el arranque de la nueva temporada.

Para la Unión General de Trabajadores, la subida del IPCA en enero tiene como causa la falta de compromiso de algunas empresas en la fijación de sus márgenes. Así, las petroleras que atendieron el pasado otoño el llamamiento del Gobierno para frenar el traslado del encarecimiento del crudo en aquel momento, nuevamente han elevado los precios finales de gasolinas y gasóleos. La central sindical acusa a ciertas administraciones públicas por haber subido las tasas y precios de los servicios muy por encima del promedio.

Expertos del mercado y servicios de estudios de instituciones privadas reconocen que enero «suele ser muy volátil», y esperan a conocer el avance de la zona euro y el dato definitivo del IPC nacional. Algunos analistas prevén que el diferencial de inflación de España con la media de la zona euro superará el máximo histórico de 1,6 puntos en enero. Otros recuerdan que el crecimiento de la economía española y la tasa de inflación van parejos: ambos alcanzan por estas fechas los mismos registros del año 2001. MÁS INFORMACIÓN EN www.lavozdecadiz.com