Una juez investiga las cuentas de las primarias de Ballarín en Moncloa

El diputado electo del PP Álvaro Ballarín tiene otro frente judicial abierto. Según la documentación que obra en poder de este periódico, se enfrenta a una denuncia civil por una presunta lesión de los derechos fundamentales de su rival a las primarias del partido en el distrito de Moncloa-Aravaca, del que es aún presidente y concejal.

Como ya destapó ABC, el número 7 de la lista de Cristina Cifuentes para la Asamblea, por otra parte, ha estado imputado por prevaricación, falsedad documental y desobediencia por el asunto de la construcción de un párking. Sólo la retirada de la querella por los demandantes le salvó provisionalmente de la imputación. Eso sí, la Fiscalía está a la espera de recibir el auto de sobreseimiento provisional para decidir si vuelve a pedir que vuelva a su anterior condición procesal, lo que sería un escollo para que Ciudadanos pacte el apoyo a la investidura de la candidata popular.

La juez que instruye el caso de las primarias ha aceptado una de las medidas cautelares que solicitaba el demandante, José Carril: que se le envíe una copia de las cuentas de la agrupación de los años 2012 y 2013, en lo que respecta a los gastos destinados a la promoción de las candidaturas para esos comicios internos. Una contienda electoral que ganó Ballarín en enero de hace dos años y que ya entonces presidía el partido en el distrito. ABC intentó ponerse ayer en contacto vía telefónica con el edil, sin éxito.

El litigio comenzó a raíz de la demanda interpuesta por José Carril en abril de 2014. En ella, expone los hechos por los que considera que el presidente de Moncloa lesionó sus derechos fundamentales y extiende la acusación al secretario general del PPen el distrito, Adolfo Arias. El 6 de noviembre de 2012, se convocaron las elecciones primarias, a las que concurrieron Ballarín y Carril. «Los candidatos contarían con todos los medios del partido, acceso a la base de datos, telefonía y un sitio dentro de la sede donde desarrollara la actividad», explica el demandante en su escrito.

La convocatoria fue comunicada, siempre según esta versión, por carta fechada el 18 de diciembre, aunque «finalmente fue recibida el día 27». «Sin embargo, hasta el 9 de enero de 2013, no pude tener acceso a la base de datos de los afiliados, elemento imprescindible», se queja. Además, Carril afirma que Ballarín contó desde mucho antes —desde el 6 de noviembre— con la base de datos, «sin perjuicio de conocer la fecha de la convocatoria con anterioridad a que se hiciera pçublica». Es decir, que dispuso de 63 días más que su contrincante para poder dirigirse a los afiliados.

Una Navidad muy tensa

Pero Carril denuncia una conducta aún más grave:«Álvaro Ballarín utilizó en su exclusivo beneficio los medios y recursos del partido para poder respaldar y fortalecer su candidatura». Hace referencia, por ejemplo, al envío de una carta, como presidente del PPde Moncloa-Aravaca, el 20 de diciembre de 2012 (es decir, en plena campaña electoral), en la que recuerda a los afiliados que esa Navidad ya pueden disfrutar de un centro municipal de mayores en el distrito: «Hemos devuelto una pequeña parte de la ingente deuda que tenemos con nuestros mayores. Soy consciente de que nunca podremos hacer por ellos lo que ellos han hecho por nosotros», reza el final de la misiva, en la que añade, de su puño y letra:«Te deseo una Feliz Navidad y lo mejor para 2013. Un fuerte abrazo de tu amigo Álvaro Ballarín».

Esas Navidades y fechado el mismo día que la misma carta, el demandado remite a sus afiliados un folleto («utilizando la creatividad de la Junta de Distrito, y no solo la del partido», apostilla José Carril) promocionando un ciclo de seis representaciones de la ópera «La Boheme», de Puccini. Lo hace a modo de invitación («Espero verte allí y que podamos disfrutar de una noche especial»), pese a que la entrada era libre, hasta completar aforo. La última de las puestas en escenas, por cierto, se celebró el 10 de enero de 2013, el día antes de las primarias.

«Campaña de difamación»

Pero la demanda de Carril tiene una segunda parte, por la comisión de un supuesto delito contra el derecho al honor. El denunciante refleja que «se inició una campaña de descrédito y difamación» contra él: «Fue tildado de estafador y delincuente y personas del entorno de Ballarín, como su segundo (Adolfo Arias), me pidieron que abandonara mi candidatura».

La copa de Navidad del PP de Moncloa resultó de lo más tensa. Se celebró en el Hotel Husa Princesa y en ella, según la demanda que obra en el juzgado de Primera Instancia 34, Arias le volvió a calificar de delincuente. Asimismo, dos mujeres de la candidatura de Carril recibieron llamadas telefónica de una persona de la otra lista «en los mismos términos, reiterando la advertencia de graves consecuencias en caso de no rectificar».

El 4 de febrero de este año, la juez aceptó la demanda, en la que Carril solicita una indemnización de 100.000 euros. En la parte dispositiva del decreto, se acuerda, además, «advertir a la parte demandada que la comparecencia en juicio debe realizarse por medio de procurador y con asistencia de abogado». También se da acuse de recibo de las medidas cautelares solicitadas por Carril: la creación de una gestora en la Presidencia del Distrito; la convocatoria de nuevas primarias en 15 días;que Ballarín no participe en actos en nombre del PPde Moncloa-Aravaca, y que el partido remita copia de los ejercicios económicos de los años 2012 y 2013, con especial incidencia en los gastos de la promoción de las candidaturas. Sólo esta es la medida aceptada. Ambas partes han recurrido ante la Audiencia Provincial, que aún no se ha pronunciado.