Violentos choques entre policías y antifascistas aue querían reventar el congreso del partido ultra alemán

Unos 400 manifestantes antifascistas han sido detenidos esta mañana en Stuttgart cuando intentaban reventar el congreso anual del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD). Había aproximadamente un millar de policías desplegados en la zona de la Feria Comercial de Stuttgart para velar por la seguridad, pero no han podido evitar los altercados provocados por los cientos de manifestantes que han intentado entrar en el recinto, han lanzado petardos y quemado neumáticos, según ha explicado un portavoz policial en declaraciones a la televisión pública alemana ARD.

Los disturbios y los retrasos en el registro de los más de 2.000 afiliados del partido han provocado una demora de aproximadamente una hora en la inauguración del congreso, prevista inicialmente para las 10.00 horas.

AfD cuenta ahora mismo con representación en ocho de los 16 estados federales de Alemania y pretende irrumpir en el Bundestag, el Parlamento federal, en las elecciones de otoño de 2017, tres años después de su creación, pero es en el congreso de este fin de semana en el que se elaborará su primer documento ideológico de fondo.

Hasta ahora se ha definido como un partido «conservador, liberal y patriótico», pero a menudo su discurso gira en torno al rechazo del Islam, la inmigración y a unos planteamientos euroescépticos.

El Tribunal Administrativo de Stuttgart rechazó a última hora de ayer un recurso de urgencia interpuesto contra la celebración del congreso pero no pudo evitar la instalación luminosa instalada por la organización «Izquierda Intervencionista de Rhein-Neckar» en la estación central en la que aparecían consignas contra AfD y mensajes de acogida a los refugiados como «Solidaridad para todos». La celebración de este congreso, en el que AfD cerrará su programa electoral de cara a las próximas elecciones generales y contra el que se esperan varias manifestaciones en las calles, se centrará en la gestión de la creciente influencia del islam en la sociedad alemana y de momento ya ha conseguido que el asunto no quede reducido al argumentario de la extrema derecha.

El presidente del grupo parlamentario del partido de Merkel, CDU/CSU, Volkr Kauder, entró ayer al trapo y reconoció que «el Estado debe controlar las mezquitas en Alemania», acercándose a propuestas que votará AfD como la prohibición de que las mezquitas alemanas sean financiadas desde el exterior del país o la prohibición de que los imanes que predican en ellas sean formados fuera de Alemania. «Este es un país en el que el Estado está por encima de las religiones y eso es algo que tienen que entender y aceptar los representantes de todas las religiones», dijo.

Islam compatible

Kauder se distanció de otras propuestas más radicales que también serán discutidas en el congreso de AfD, como la prohibición de los minaretes o la obligación de predicar en alemán. «Todo eso entra dentro de la libertad religiosa, que está garantizada en este país, pero una cosa es la libertad religiosa y otra el abuso de la religión», explicó, Con sus declaraciones, Kauder ha dado un paso de acercamiento desde el partido conservador a algunas de las tesis de AfD que están llevando a este joven partido al segundo puesto, por ejemplo, en las recientes elecciones regionales, en las que en alguno de los Länder obtuvo hasta el 24% de los votos. La responsable del Partido Socialdemócrata (SPD) Kerstin Griese respondió que «estoy convencida de que hay un islam que sí es compatible con la Constitución alemana».

La líder de AfD, Frauke Petry, que intervendrá hoy ante el pleno del congreso y considerada representante del ala moderada, adelantó ayer su propuesta de prohibición de los minaretes, argumentando que «se puede ser creyente y practicar la religión musulmana en privado y para eso no se necesita ningún minarete». Una de las decisiones que se filtró ayer con la llegada a Stuttgart de los primeros delegados, fue la decisión del partido de presentar su propio candidato a la elección de Presidente Federal. El elegido es el ex tesorero de Frakfurt Albrecht Glaser, ex miembro de la CDU y cofundador de AfD.