España y Venezuela acuerdan la vuelta de los embajadores expulsados
La media ha sido adoptada tres meses después de que Maduro declarara al representante español «persona non grata»
Los Gobiernos de España y Venezuela han acordado el regreso de los respectivos embajadores a Caracas y Madrid, tres meses después de que se produjera la expulsión de ambos , según informó hoy el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado. El embajador español, Jesús Silva, volverá en los próximos días a su puesto en la capital venezolana.
Fuentes diplomáticas españolas indicaron que el Gobierno aceptó la petición hecha por las autoridades venezolanas hace unos días para normalizar las relaciones diplomáticas. El pasado día 11, Nicolás Maduro envió a Madrid a su viceministro para Europa, Yván Gil, quien transmitió al secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Fernando Garcia Casas, el deseo del presidente de Venezuela de «normalizar un dialogo bilateral teniendo en cuenta los importantes vínculos existentes entre los dos países».
El propio Maduro hizo unas declaraciones en las que manifestaba su voluntad de que pudieran regresar los embajadores expulsados
Gil entregó una carta del ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Jorge Arreaza , para su colega español, Alfonso Dastis , quien, un día después le contesto a través de una llamada telefónica, expresando la disponibilidad española al regreso de los embajadores.
La nota difundida hoy por Exteriores da cuenta de que los embajadores volverán en los próximos días «con el fin de restituir los canales de diálogo diplomático entre los dos gobiernos, en el marco del respeto mutuo y del Derecho Internacional». Además, subraya que la medida irña en beneficio d ellos ciudadanos de los dos países «que está unidos -dice- por estrechos vínculos que deben preservarse». Más de 200.000 españoles viven actualmente en Venezuela.
Las fuentes consultadas por ABC indicaron que la decisión tomada no cambia nada las exigencias españolas en relación con que las elecciones en Venezuela se celebren con garantías y con respeto a los derechos y libertades de los ciudadanos, ni tampoco en relación con las sanciones adoptadas por la UE.
El pasado 25 de enero, Venezuela declaró «persona non grata» al embajador español, Jesús Silva , en protesta por lo que consideró «continuas agresiones» e «injerencias» del Gobierno español en los asuntos venezolanos, en los que siempre ha expresado su respaldo a los partidos opositores y ah reclamada la puesta en libertad de sus líderes encarcelados. El régimen bolivariano se mostró especialmente molesto por el hecho de que España encabezara la iniciativa europea de imponer sanciones contra siete altos cargos del régimen, entre ellos el número dos, Diosdado Cabello , lo que les impide, entre otras cosas viajar a territorio de la Unión Europea, donde residen algunos familiares directos.
La respuesta española a la expulsión del embajador fue «proporcional» ya que declaró igualmente «persona non grata» y expulsó al embajador de Venezuela en España, Mario Isea, recordando las repetidas declaraciones de Maduro contra el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, al que acusó de «corrupto», «racista» y «colonialista».
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