El vídeo viral del nuevo desplante de Melania a Donald Trump

La familia presidencial de Estados Unidos reaparece unida por primera vez tras el inicio de la pandemia del coronavirus

Última hora: Trump y Melania, positivo por coronavirus

Melania y Donald Trump REUTERS

ABC

En la primera imagen familiar que protagonizaron Donald, Melania y Barron Trump desde el inicio de la pandemia de coronavirus llamó la atención el cambio físico del joven de 14 años. Barron ya supera en estatura tanto a su padre que mide 1,90 y como a Melania que alcanza el 1,80. La estatura del joven ha llamado tanto la atención que algunas personas en redes sociales han bromeado con que podría tener futuro en la NBA. E incluso algunos ya le han bautizado como «the Trump Tower».

Pero, con el paso de las horas, el estirón del joven ha dejado el protagonismo al nuevo desplante de su madre al presidente de los Estados Unidos. Melania Trump vuelve a rechazar la mano al mandatario bajando las escaleras del Marine One, aunque en esta ocasión de manera muy descarada.

En su lugar, prefiere agarrar con fuerza su bolso de más de 15.000 euros pese a que Donald Trump lo intenta hasta en dos ocasiones. Finalmente acaba aceptando la negativa y saluda a los presentes al bajar la escalerilla del avión. El vídeo en cuestión no ha tardado en hacerse viral en las redes sociales.

No es la primera vez que Melania Trump rechaza a su marido. Si al comienzo de su mandato se decía que Donald Trump era el que humillaba a su mujer con alguna de sus actitudes (como el día de su investidura o en su reunión con los Obama), después fue Melania Trump quien realizó un par de gestos que no pasaron desapercibidos. Durante su visita a Israel, Melania pareció negarle la mano a su marido nada más bajar del avión. Solo un día después, la primera dama pareció repetir ese gesto al poco de aterrizar en Roma, y las redes sociales se llenaron de comentarios a favor y en contra de Melania bajo la etiqueta #FreeMelania.

Desde su llegada a la Casa Blanca su relación ha copado titulares, sobre todo a raíz del caso de Stormy Daniels , la actriz porno con la que supuestamente el presidente de los Estados Unidos mantuvo relaciones sexuales. A la primera dama nunca le ha importado las aventuras o desventuras de su marido. Aseguraba entonces estar muy centrada en su papel y tener cosas más importantes sobre las que pensar y a las que dedicarse. «Ya sé que a la gente y a los medios les gusta rumorear sobre nuestro matrimonio», decía. Pero, pese a todo y a la rotundidad de sus palabras, los gestos y comportamientos de ambos los han delatado en varias ocasiones.

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