Primer ministro de cómic

Desde su llegada al poder en noviembre, la impronta de Justin Trudeau no ha parado de acumular originalidades. La imagen fresca de un primer ministro joven, deportista y con un talante abierto y conciliador, ha arrinconado tensiones políticas hoy ya olvidadas en Canadá. En estado de gracia, el arrollador primer ministro va a agrandar aún más su creciente ola de popularidad. Será a finales de agosto cuando la factoría de superhéroes Marvel le sitúe en la portada de uno de sus cómics. Sigue la senda de su padre, Pierre Trudeau, conocido como el «Kennedy canadiense», recreado en portada en 1979, y del presidente Obama, idealizado en la misma ficción desde 2009.

A diferencia del presidente estadounidense Trudeau aparecerá caricaturizado como el boxeador que fue en sus años más jóvenes.

Afición que compartió con la de portero de discoteca, no tan lejana de las habilidades pugilísticas, antes de dedicarse a la enseñanza. Sentado en rincón del cuadrilátero, ataviado con dos guantes de boxeo rojos, una camiseta estampada con una hoja de arce, como la bandera de Canadá, y pantaloncillo negro, Justin Trudeau nos ofrece esa sonrisa profidén que ha conquistado a tres cuartas partes de los canadienses.

Entre las variantes que sugiere la raíz gramatical de su nombre pila, entre juez y justiciero, el personaje que encarna se identifica con el primero. Una suerte de sabio asesor ante conflictos éticos que se distancia poco del papel pacifista que ha venido a encarnar en la comunidad internacional. No en vano, su primer mandato nada más tomar posesión fue el de retirar las tropas de la guerra que libra contra Daesh en Siria e Irak la coalición internacional liderada por Estados Unidos. Un paralelismo con su admirado Obama, que llegó al poder aupado por su decisión de salir de Irak; pero también una ironía que su sucesor en querencias buenistas le haya abandonado a las primeras de cambio.

Por eso resulta aún más paradójico que el título del cómic tenga tintes bélicos: «Civil War II: Choosing Sides #5» (II Guerra Civil: Eligiendo Opciones). Pero no es casual ni ingenuo. Como explica el creador de la serie, responsable de incluir al jefe del Gobierno canadiense en el universo Marvel, Chip Zdarsky, la propuesta es colocarse en el lugar del primer ministro y ver «cómo responde ante determinadas situaciones de enfrentamiento». El nudo habitual de los cómics de Marvel plantea el eterno conflicto entre la guerra preventiva y la guerra a posteriori, polémica donde las haya en los últimos tiempos, que personifican Iron Man y Capitán Marvel. El nuevo episodio sitúa Trudeau como el guía espiritual que resuelve los conflictos éticos. Aunque en este caso, con los personajes canadienses de Marvel: el equipo Alfa Flight, que le arropa en la imagen de portada, y un nuevo personaje, Ulysses, que ostenta el poder de visualizar los hechos antes de que se produzcan.

El encargado de caracterizar a Trudeau, el dibujante de cómic Ramón Pérez, explica que su elección de la indumentaria y la pose boxeística del primer ministro pretende diferenciarle de los demás gobernantes: «No me imagino a Obama como boxeador o en anuncios de televisión, o cualquier cosa de la que es capaz Trudeau». Y es que el presidente estadounidense siempre ha aparecido en los cómics en traje y corbata.