Michavila y Genoveva Casanova, el noviazgo que ya adelantó ABC

José María Michavila y Genoveva Casanova ya no se ocultan. A raíz de unas imágenes publicadas en la revista «¡Hola» que confirman el scoop adelantado en estas páginas por Beatriz Cortázar el pasado mes de julio, lo cierto es que ya nadie duda de que se trata de una relación consolidada. Ante tamaño testimonio gráfico, nos armamos de valor para hablar con los protagonistas, con el siguiente resultado en el marcador: «Genoveva ni confirma ni desmiente tener un affaire con el abogado», según nos dice su representante; y el exministro «no tiene previsto conceder entrevistas ni declaraciones de carácter personal o político, aunque el tema sobre su relación sea tratado en una crónica», nos aclaran desde su gabinete de prensa.

Como los cánones de la educación sentimental mandan, la tercera reacción que impelía buscar era la de Cayetano Martínez de Irujo, en calidad de ex bien avenido con la madre de sus hijos, quien, con mucho respeto pero no exento de contundencia, increpa con su rancio abolengo verbal: «Le ruego que no me llame para ese tema, y menos a mi teléfono privado.

No tengo absolutamente nada que decir».

Lo cierto es que, en los últimos meses, toda la alta sociedad madrileña y la militancia pepera se hacían lenguas de que ambos compartían reuniones con amigos comunes, como Patricia Rato, los Ponce o los Segrelles, y que su amistad se consolidaba a tragos largos y en copa de balón. A día de hoy, aunque sigan sin confirmarlo, no hay que ser Angela Lansbury para saber que existe una relación que, como diría mi abuela, se ha forjado en la calle de las tiendas buenas.