Tudela, ciudad cardioprotegida

Tudela, 35.000 habitantes. Dos de ellos, médicos, Juanjo y Ana, expusieron al alcalde la necesidad de saber cómo actuar y tener un desfibrilador cerca cuando una persona, en plena calle, sufre un paro cardiorrespiratorio. La respuesta fue inmediata. Eneko Larrarte, alcalde: "La ciudad se revolucionó, tanto las administraciones públicas, en concreto el ayuntamiento, como la sociedad civil", nos explica Eneko Larrarte, alcalde de la ciudad. Ya hay 45 aparatos de reanimación repartidos por el municipio, como el colocado en la entrada del Ayuntamiento. "En el momento en el que se produce una parada, se pone en marcha el cronómetro más importante de la vida de una persona, porque cada minuto que pasa, disminuye un 10% la probabilidad de superviviencia de esa persona", indica Juanjo Blasco, uno de los impulsores de la iniciativa. Juan, agente 56 de la Policía local, nos comenta que "se ha formado a toda la plantilla para el uso y manejo del desfibrilador. Solemos ser los primeros en llegar al lugar cuando hay una llamada. Y sí que se ha usado un par de veces". Cuando se ve que el afectado no respira, hay que avisar al 112. Se hacen las compresiones y el aparato avisa cuándo se puede hacer la descarga. Algunos comerciantes se han sumado y pagan entre ellos el que se ha colocado en su plaza. Pilar, peluquera, colabora y, además, va a aprender a usarlo. "Puede ser dentro y fuera, en la calle, porque a veces ocurren estos accidentes". Como Manuel, uno de los hosteleros. "Nos enseña a mantener el oxígeno a la persona, para que dé tiempo a que la ambulancia venga". La idea gusta a los vecinos, porque el tiempo es vital y unos minutos pueden salvar la vida.-Redacción-