Comienzan las declaraciones ante el juez de concejales, exconcejales y asesores del Ayuntamiento de Valencia

Desde primera hora se ha producido el desfile de concejales, exconcejales y asesores municipales por el juzgado número 18 de Valencia. Los primeros en llegar han sido los ediles Vicente Igual y Beatriz Simón, ninguno ha querido dar detalles a la prensa de la presunta trama de financiación ilegal que investiga el juez y que trata de esclarecer si concejales y asesores aportaron 1.000 euros para la campaña de las municipales del pasado mes de mayo que luego, presuntamente, se les devolvían en B. En total 17 concejales y exconcejales y 21 asesores están investigados, lo que antes se llamaba imputado.La que sí ha hablado hoy es María José Alcón, exconcejala de cultura y detenida en la operación Taula. En una conversación telefónica le ha dicho OKDiario que la secretaria del grupo municipal, y también detenida Carmen Fuster le dijo: "Toma estos dos billetes de 500 euros cada uno, y  ahora haces un ingreso en la cuenta del PP".Alcón, que afirma sentirse engañada y abandonada por el partido dice que no se negó a realizar ese pago porque "Mari Carmen (Fuster), por su carácter y por su forma de  ser, y además por el respaldo de la amistad que le unía  con la alcaldesa por todos conocido, tenía autoridad  suficiente para eso y para mucho más". La casa de Rita Barberá hoy permanecía vacía. La última vez que se dejó ver fue el pasado martes cuando abandonó su domicilio en el asiento trasero de un coche. Se espera su presencia en el Senado el próximo miércoles, en la reunión de su grupo parlamentario en la cámara alta, un encuentro al que también se prevé que asista Mariano Rajoy.Esta semana el PP Valenciano se reúne para nombrar a la gestora que se hará cargo del grupo popular en el Ayuntamiento y para pedir fecha a Génova para refundar el partido en Congreso Extraordinario. La actual presidenta del PP valenciano Isabel Bonig se postulo el viernes para liderar ese nuevo proyecto. Hoy el Diario el País publica que desde la Consejería de Infraestructuras, que Bonig presidió, se pidieron donaciones a altos cargos del departamento, fueran o no militantes del partido, para financiar la campaña electoral de las autonómicas de 2014.