Alberto Varela - CRÓNICAS ATLÁNTICAS

El tren que viene

Iñigo de la Serna lanzó su globo sonda en TVE a ver qué pasaba y se encontró con un muro de críticas

Alberto Varela
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Mucho hemos hablado esta semana del AVE a raíz de las desafortunadas palabras del ministro de Fomento en las que cuestionaba el proyecto tal y como está previsto, con la variante de Taboadela y la doble vía en esos 18 kilómetros de la discordia. Iñigo de la Serna lanzó su globo sonda en TVE a ver qué pasaba y se encontró con un muro de críticas. No porque los gallegos no seamos comprensivos, sino porque ya estamos cansados de ser los últimos en todo.

Podemos asumir el tener que esperar unos meses más por el tren del siglo XXI, y de hecho no hubo críticas cuando el ministro anunció en Santiago que había que repensar los plazos, lo que no es admisible en ningún caso es una vía de tercera categoría, que cree un problema urbanístico en Orense y que se quede vieja antes incluso de su estreno.

No nos va eso de aceptar pulpo como animal de compañía.

Sorprendería, además, que el gobierno de Rajoy terminara castigando a una de las pocas comunidades que cumple rigurosamente con el equilibrio presupuestario, que reduce deuda y que siempre ha sido solidaria. Nunca ha ido con nosotros eso de señalar qué obras hay que eliminar en otras regiones para favorecer las nuestras, siempre nos hemos alegrado de la modernización de las infraestructuras en el arco Mediterráneo, y la verdad da rabia ver como hay quien a la hora de recortar piensa inmediatamente en el Noroeste.

Cuestión aparte es la de los que desde aquí se echan las manos a la cabeza ante la posibilidad de retrasos, y a la vez en Madrid bloquean los presupuestos, como si el dinero de las obras del AVE fuese a caer del cielo y no hiciese falta consignarlo en las cuentas del Estado. Y por cierto, puede ser una buena idea que si al PSdeG y a En Marea les preocupan tanto los plazos de la alta velocidad ferroviaria sus diputados siempre tienen la opción de romper la disciplina de voto de sus grupos y apoyar los presupuestos del 17. Le harían un favor a Galicia.

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