Los independentistas presos piden retrasar el inicio del juicio tres semanas
Las defensas también exigen la puesta en libertad de los exconsejeros Turull y Rull para preparar el proceso
Tres semanas más. Ese es el tiempo que han pedido varios de los exconsejeros de Carles Puigdemont que, en un principio, se iban a sentar ante el Supremo el próximo 12 de febrero por el juicio del 1-O. Según han explicado las defensas de Josep Rull y Jordi Turull, quieren un «aplazamiento» para poder estudiar «la abundante prueba anticipada» admitida para el proceso.
En un escrito dirigido al tribunal que juzgará a los responsables del referéndum ilegal del 1-O, el letrado Jordi Pina solicita que se dé un plazo de tres semanas a las partes, desde que dispongan de la totalidad de los documentos, «para que puedan instruirse del contenido de dicha prueba». La petición de las defensas de Rull, Turull y del expresidente de la ANC Jordi Sànchez se suma a la solicitud expresada por la defensa de Oriol Junqueras, que pidió el mismo plazo.
Pina también ha solicitado en otro escrito la puesta en libertad de los exconsejeros para garantizar así su derecho a la defensa, tras denunciar que en la cárcel de Soto del Real se les está impidiendo el acceso a los ordenadores donde tienen almacenados los miles de folios del sumario, y ello pese a la autorización expresa del propio tribunal para poder utilizarlos.
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