El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, junto con los representantes de los clubes de motoristas
El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, junto con los representantes de los clubes de motoristas - F.HERAS
Valladolid

Puente impide al PP asistir a una reunión «abierta» sobre la nueva concentración motera

El grupo popular municipal denuncia el «apartheid» al que le ha sometido el alcalde

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La reunión para recabar opiniones y sugerencias sobre la nueva fiesta de la moto que sustituirá a la concentración de Pingüinos estaba prevista a las 13.00 en la sala de comisiones del Ayuntamiento y hasta allí se han acercado este mediodía los concejales del Grupo Municipal Popular, que al llegar se han encontrado con la sala vacía. Y es que a última hora, el alcalde socialista Óscar Puente optó por hacer la reunión en el despacho de la Alcaldía y así evitar su entrada, con el consiguiente enfado de los concejales populares, que a la puerta de las dependencias de la Alcaldía tachaban la situación de «esperpéntica».

Hasta en tres ocasiones se ha asomado el presidente del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Valladolid, José Antonio Bermejo, quien minutos después criticaba ante los medios las malas formas: «Nos ha dicho que no hagamos nada y que no somos bien recibidos».

Ha recordado que dado que el alcalde Óscar Puente habló en el momento de la convocatoria de esta reunión de un acto «abierto« y «participativo», los populares le habían comunicado su deseo de participar, siempre con la intención de hacer aportaciones positivas. Por eso no entiende que «el alcalde vuelva a esconcerse». «Parece que tiene demasiados prejuicios contra el PP cuando somos concejales como él», ha señalado en compañía de las también ediles Mercedes Cantalapiedra y Mayte Martínez.

El presidente del Grupo Municipal Popular ha recordado que «en todo momento» su partidio ha hecho «manifestaciones» para apoyar la concentración alternativa con la idea de trabajar para solventar cualquier problema que pudiera tener la nueva concentración. «Por desgracia Pingüinos ya se ha perdido y espero que ésta no sea otro fracaso», ha señalado. «Es el primer día en la historia de la democracia, que a unos concejales elegidos democráticamente, votados por cerca de 60.000 ciudadanos se les niega de esta manera el acceso a una reunión a la que venían con carácter positivo», ha apuntado visiblemente enfadado y tachando el veto por parte del alcalde Óscar Puente de «hecho antidemocrático y contrario a la participación, tolerancia y consenso que se debe buscar e un ayuntamiento democrático». A juicio de Martínez Bermejo, «Puente ha descubierto demasiado pronto su cara real de una persona que no acepta las críticas». «Si se busca diálogo y consenso nos encontrarán, pero si lo que quieren hacer con nostros es un auténtico apartheid que lo digan y que lo sepan los ciudadanos de Valladolid», ha sentenciado recordando que en el papel de alcalde también está escuchar a los que piensan de forma distinta.

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