La Junta prevé una cuarta ola «con una notable disminución de la mortalidad»

El mismo día en el que el Consejo de Gobierno acordó el cierre del interior de la hostelería en 21 municipios de la Comunidad, quienes llevan más de un año poniendo cara y voz a la información pandémica trataron de lanzar un mensaje esperanzador, aún dejando claro que la situación sigue siendo «muy preocupante».

Algo hemos avanzado si, tal y como dijo ayer el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, «estamos en la recta final; nos quedan dos o tres meses para estar en una situación mejor», sin olvidar, eso sí, que el riesgo sigue siendo «muy alto», por lo que «no se puede bajar la guardia ni dar un mensaje erróneo de ausencia de preocupación». Mensajes de esperanza que apoya en el avance de la vacunación, sobre todo entre los mayores de 80 años, la población más vulnerable y a la que más daño hizo el Covid en las olas anteriores. De hecho, el 38 por ciento de los fallecidos tenían más de 80 años . «Cada semana que ganamos, bajamos la mortalidad porque vacunamos a la población de mayor riesgo», señaló el vicepresidente de la Junta, por lo que «aunque crezca la incidencia, esperamos que no crezca la mortalidad como en la tercera ola». «Queda muy poco; esto va a pasar más pronto de lo que parece», aseguró. Igea insistió en que el haber inoculado a más de la mitad de los mayores de 80 años con una dosis «supone una notable disminución de la mortalidad».

En cualquier caso, tanto el vicepresidente de la Junta como la consejera de Sanidad, Verónica Casado, coincidieron en destacar cómo en esta cuarta ola la subida de la incidencia está siendo menor que en enero e, incluso, durante la Semana Santa la percepción es que la movilidad ha sido inferior que la de Navidad. Unas palabras que se enmarcan en una realidad en el que ayer se notificaron 215 casos, 70 más que hace una semana , y se registraron seis fallecidos, todos en hospitales y ninguno en residencias. La incidencia sigue subiendo y ya se sitúa en 154 casos por 100.000 habitantes a catorce días y 84 a siete. Con las últimas cifras sobre la mesa y tal y como se anunció el pasado jueves, un Consejo de Gobierno extraordinario acordó ayer volver a cerrar el interior de la hostelería y salas de juego de los municipios que superan los 150 casos por cada 100.000 habitantes a catorce días. Así, u n total de 21 localidades de siete provincias (todas menos Ávila y Zamora) se verán afectadas por esta nueva medida . Además de las ciudades de Burgos, Palencia, Segovia, Soria y Valladolid, la nueva restricción afectará a los términos municipales de Medina de Pomar, Briviesca y Miranda de Ebro, en la provincia de Burgos; en Palencia, Cervera de Pisuerga, Aguilar de Campoo, Villamuriel de Cerrato y Venta de Baños; en León, Villablino y La Pola de Gordón; en Salamanca, Villamayor, Santa Marta de Tormes y Carbajosa de la Sagrada; en Segovia, Riaza y El Espinar; El Burgo de Osma (Soria), y Tudela de Duero (Valladolid). El acuerdo tendrá vigencia, una vez sea publicado en el Bocyl, a partir de las 00 horas de hoy, por un período inicial de catorce días. No obstante, la Junta actualizará cada siete días el anexo de términos municipales afectados.

De momento, los municipios afectados tienen más de 5.000 habitantes con la excepción de tres en los que una incidencia desbocada ha llevado al Gobierno autonómico a meterlos en el mismo grupo: Riaza (Segovia), con 2.513 casos por cada 1000.000 habitantes; Cervera de Pisuerga (Palencia), con 1.932, y Pola de Gordón (León), con 1.153. Casado, justificó las nuevas restricciones en el incremento de los contactos y también en el aumento del número de ingresos. Aclaró, no obstante, que en esta ocasión no se ha decretado el cierre de los grandes centros comerciales porque así se decidió en el último Consejo Interterritorial de Salud. En el caso de los gimnasios, explicó que ha quedado demostrado que quienes realizan más ejercicio físico sufren menos las consecuencias del Covid.

La decisión de cerrar el interior de la hostelería no gustó al sector ni a algunos alcaldes, como los socialistas de Valladolid, Óscar Puente y Soria, Carlos Martínez, mientras que para la alcaldesa de Segovia, también del PSOE, Clara Luquero, «no tenemos otro remedio que respetar y aceptar la decisión porque los datos aquí no son buenos». Por su parte, el regidor del municipio segoviano de Riaza, Benjamín Cerezo, se preguntó por qué se cierra el interior de la hostelería si la incidencia del Covid se centra en el colegio.