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Edificio del Ioba, situado en el Campus Miguel Delibes, de la UVa - ICAL
Ciencia

Investigadores del IOBA prueba con éxito en conejos un implante para pacientes sin globo ocular

El objetivo es que los afectados se encuentren lo más cómodos posible

Valladolid Actualizado: Guardar
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Un equipo de investigadores del Instituto Universitario de Oftalmobiología Aplicada (IOBA) de la Universidad de Valladolid (UVa) ha llevado a cabo una prueba exitosa en conejos un nuevo implante de polietileno para pacientes sin globo ocular. De forma previa ha estudiado la seguridad y la compatibilidad del material desarrollado por la empresa AJL Ophthalmic.

La iniciativa cuenta con la ventaja de permitir el crecimiento de los tejidos dentro del globo ocular, debido a su estructura de poros abiertos interconectados, así como de disponer de una superficie anterior lisa y una posterior más porosa, que facilita su integración, minimizando el riesgo de exposición a largo plazo.

El equipo investigador está integrado en el Centro en Red de Medicina Regenerativa y Terapia Celular de Castilla y León, del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, y ha intervenido además en la prueba con el apoyo de la empresa AJL Ophthalmic y el Centro de Investigación Biomédica en Red en Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina (Ciber-BBN).

En ocasiones, y debido a traumatismos, infecciones o tumores, los especialistas no pueden evitar la ceguera de un paciente. En estos casos, el objetivo es que los afectados se encuentren lo más cómodos posible, que no sufran dolor y que el ojo ciego sea estéticamente adecuado. Sin embargo, cuando se presenta un dolor fuerte y constante se puede recurrir a la enucleación o a la evisceración, un tratamiento que consiste en vaciar el contenido del globo ocular manteniendo la esclera o paredes del ojo –la denominando «parte blanca»- preservando así los músculos que mueven el ojo.

Para restaurar el volumen del ojo se recurre a la inserción de una prótesis orbital. Los primeros implantes de estas características estaban realizados de materiales como vidrio, plástico, cartílago y silicona y ya en los años 90 se empezaron a introducir prótesis elaboradas a partir de hidroxiapatita y polietileno poroso que, además de mejorar la motilidad, ofrecen un mejor aspecto estético.

En concreto, en el estudio encabezado por el IOBA y publicado recientemente en la revista «Journal of ophthalmology», se estudia uno de estos nuevos implantes desarrollado por la firma alavesa AJL Ophthalmic. Se trata de Oculfit, un implante esférico diseñado para ser implantado en la cavidad resultante del globo ocular eviscerado o enucleado. Está fabricado en polietileno poroso de alta densidad, un material biocompatible, no tóxico ni alergénico, que tiene la ventaja de permitir el crecimiento de los tejidos dentro de él, debido a su estructura de poros abiertos interconectados.

Estos implantes disponen de una superficie anterior lisa y una superficie posterior más porosa que facilita su perfecta integración, minimizando el riesgo de exposición a largo plazo. Además, disponen de túneles para facilitar al cirujano la fijación de los músculos rectos directamente al biomaterial. Asimismo, se acompañan de un accesorio introductor que facilita su implantación, evitando la adhesión de tejidos en su tracto.

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