Pérez de los Cobos: «Si hubiera tenido el mando de los Mossos, mi primera decisión habría sido apartar a Trapero»

El coordinador del dispositivo del 1-O apuntala la acusación contra el «major»: «Puso palos en las ruedas»

Diego Pérez de los Cobos, en el juicio contra Josep Lluís Trapero EFE

Esta funcionalidad es sólo para registrados

«Insuficiente, inadecuado e ineficaz». Así fue el dispositivo policial que organizó el «major» de los Mossos d´Esquadra Josep Lluís Trapero en Cataluña el 1 de octubre de 2017, día del referéndum ilegal. «Fue un operativo más encaminado más a permitir la votación que a impedirla», ha asegurado este lunes el coronel Diego Pérez de los Cobos en el juicio que se celebra contra la cúpula de la policía autonómica en la Audiencia Nacional y en el que Trapero se enfrenta a 11 años de cárcel por un delito de rebelión.

El testimonio de Pérez de los Cobos, coordinador del dispositivo que debía integrar a los tres cuerpos policiales, ha sido demoledor para el «major», a quien, como ya hizo en el Supremo, ha acusado de obstruir el operativo, de alinearse con el Govern y de no tener la menor intención de colaborar con el mandato judicial. «Si yo hubiera tenido mando sobre los Mossos mi primera decisión habría sido apartar al major trapero, que estaban permanentemente poniendo palos en las ruedas en todas las actuaciones tendentes a impedir el referéndum», ha dicho.

El coronel se ha referido a las reticencias que mostró Trapero desde el primer momento al nombramiento de Pérez de los Cobos como coordinador de las tres policías, y a cómo dejó constancia de ese malestar de formal verbal y escrita en varias ocasiones, hasta el punto de que llegó a impugnar la decisión que había tomado el fiscal superior del TSJ de Cataluña al considerar que los Mossos no necesitaban la ayuda de ningún otro cuerpo para enfrentarse al mandato de la magistrada. Las mismas palabras que pronunció el entonces consejero de Interior Joaquim Forn . Tal fue el desacuerdo de Trapero con la designación de Pérez de los Cobos que dejó de acudir a las reuniones de coordinación convocadas por el coronel.

El testigo ha asegurado que Trapero estaba alineado con el presidente Puigdemont y con Forn (condenado por sedición), hasta el punto de que los primeros estaban informados del contenido de las reuniones policiales. De hecho, en la junta de seguridad que convocó Puigdemont el 28 de septiembre el propio Trapero asumió públicamente la tesis de los miembros del Govern. En ese encuentro, ha relatado el testigo, el «president» quiso fijar los criterios de actuación de la policía judicial, y tanto él como Trapero se «agarraron» a la referencia que la juez Mercedes Armas hacía en su auto sobre el hecho de que había que mantener la convivencia ciudadana. « En ningún caso hablaron de impedir el referéndum. Es como si el pirómano decidiera las condiciones en las que el bombero tiene que apagar el fuego », ha señalado de forma metafórica el coronel.

Tal y como habían transcurrido las cosas los días previos al referéndum, los peores presagios en relación a la actuación de los Mossos se confirmaron el 1-O y se vio que el plan que Trapero había puesto en marcha era el mismo que presentó inicialmente ante el fiscal superior y que se comprometió a modificar por ineficaz. El dispositivo que se había acordado pasaba por la intervención de los Mossos y sólo en caso de que fueran requeridos por estos, entrarían en juego Policía Nacional y Guardia Civil. Pérez de los Cobos ha apuntado que a primera hora de la mañana ya constataron que el escenario que se planteaba «era el peor de los posibles». «Habíamos barajado tres hipótesis: colaboración, pasividad y obstruccionismo . Consideramos que nos moveríamos entre la primera y la segunda; y nos encontramos con que se movieron entre la segunda y la tercera», ha dicho.

El testigo ha criticado el hecho de que Mossos hiciera público sus pautas de actuación para el 1-O. «Más que pautas yo diría pistas», ha dicho, porque los convocantes supieron lo que tenían que hacer para que la votación fuera exitosa. Se dijo que si había mucha gente no se haría uso de la fuerza y tampoco si había menores, ancianos o colectivos vulnerables... En definitiva, «configuraba cuál era el escenario de no actuación». Estas pautas, ha recordado Pérez de los Cobos, se difundieron en una reunión en la que participaron 200 mandos de los mossos , luego se colgaron en la intranet corporativa, «a la que tienen acceso 17.000 mossos», y finalmente aparecieron en medios de comunicación. «La sorpresa fue cuando el 1-O lo que se vio fue precisamente ese escenario de no actuación».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación