La mujer hallada muerta en el interior de un coche en Calviá fue asesinada por su posible pareja

Una vez cometido el crimen, para el que se utilizó una escopeta de repetición, el presunto homicida se suicidó utilizando la misma arma

Agentes de la Guardia Civil investigan el suceso de Calviá EFE

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La Guardia Civil prosigue este viernes la investigación sobre el suceso mortal ocurrido ayer al mediodía en el municipio mallorquín de Calviá, cuando fueron descubiertos los cuerpos sin vida de un hombre y una mujer en el interior de un vehículo, junto con una escopeta. Los primeros indicios apuntan por ahora a que, como ha avanzado el diario «Última Hora» y ha podido confirmar ABC, el hombre habría disparado a su posible pareja —aún no está clara la relación personal que había entre ambos— y luego se habría suicidado utilizando la misma arma.

Como se ha indicado, el trágico suceso tuvo lugar ayer. Poco después de las 14.30 horas, la Guardia Civil recibió el aviso de un posible tiroteo en las inmediaciones de una gasolinera ubicada en la localidad de Peguera. La Policía Local de Calviá fue también advertida de lo ocurrido. Cuando los agentes de la Benemérita llegaron al lugar, encontraron los cadáveres de las dos personas en el interior del mencionado coche. Ambas víctimas presentaban heridas de bala en el rostro. La mujer había recibido un disparo a quemarropa en la cabeza , mientras que el hombre había colocado la escopeta entre las piernas y se había disparado en la cara. Los dos habrían fallecido al instante.

El hombre estaba sentado en el asiento del piloto y la mujer se encontraba en el asiento del copiloto. El vehículo estaba casi pegado a un muro por la parte del copiloto, lo que imposibilitaba la salida de la mujer en caso de que hubiera intentado huir o abandonar el coche. Las dos primeras hipótesis que se barajaron sobre el suceso fueron la de un posible crimen de violencia de género o la de un suicidio pactado, si bien por ahora no habría aún pruebas concluyentes en ese sentido.

Inicialmente, se desconocía la identidad de los dos fallecidos, si bien con posterioridad se pudo confirmar que el presunto homicida tenía 36 años de edad y era de nacionalidad española , mientras que la mujer tenía 37 años y era de nacionalidad búlgara. Según ha avanzado también el diario «Última Hora», al parecer ambos residían desde hacía poco tiempo en casa de la madre del hombre, ubicada en Palma. En cuanto al arma homicida, una escopeta de repetición, habría sido adquirida por el hombre hace apenas un mes. De momento, como se ha señalado ya, todas las posibles líneas de investigación continúan abiertas.

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