Iglesias relega a Errejón a un actor para «apuntalar» el poder

El líder de Podemos admite un error: haber confiado en «la palabra de Sánchez»

Pablo Iglesias flanqueado por Irene Montero e Ione Belarra, ayer en el Consejo Ciudadano Estatal de Podemos Efe
Juan Casillas Bayo

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Pablo Iglesias no quiere que nadie le arrebate su espacio y por eso ayer, en el Consejo Ciudadano Estatal de Podemos , reivindicó a su formación como la única que combate las «oligarquías». Lo hizo en un intento de distanciar su opción política de la de un Íñigo Errejón al que acusó de «apuntalar» el bipartidismo. El regreso de su otrora número dos al panorama nacional supone una reedición del enfrentamiento dialéctico que protagonizaron ambos en la segunda Asamblea Ciudadana de Podemos, Vistalegre 2.

El secretario general de Podemos buscaba ayer tranquilizar a sus líderes territoriales en un cónclave más vacío de lo habitual, en el que lanzó mensajes de unidad después de la fuga de los dos únicos diputados que tenía Podemos en la Región de Murcia . Ambos se unen a Más País , plataforma para la que Iglesias reclamó «respeto». «Respetamos a todos los partidos, también al de Íñigo Errejón», afirmó Iglesias a mitad de su discurso inicial, único en abierto, después de una primera parte centrada en atacar al presidente del Gobierno en funciones, el socialista Pedro Sánchez .

Aunque las menciones a Errejón fueron mucho menores, Iglesias trasladó el debate de Vistalegre 2 a las urnas del próximo 10 de noviembre . El líder de Podemos recordó ante los suyos cómo Errejón quiso hacer presidente a Sánchez tras haber sellado este el famoso «pacto del abrazo» con Ciudadanos (Cs), cómo era contrario a la coalición con Izquierda Unida (IU) o cómo, desde fuera ya de la política nacional, era partidario, según Iglesias, de hacer a Sánchez «presidente gratis y sin garantías».

Sánchez, en la diana

«Debemos recordar que los inscritos de Podemos, en todas las consultas, señalaron un camino distinto: que Podemos no nació para apuntalar el bipartidismo », aseveró Iglesias para revestir de legitimidad sus tesis. De las alianzas que ha cerrado Errejón con Compromís , la mayor parte de Equo o la Chunta Aragonesista no hubo mención alguna. La única autocrítica que hizo Iglesias, de hecho, fue un «error» que le sirvió para atacar a Sánchez; convertido ayer, como parece que sucederá en la campaña, en la principal diana de Podemos.

«Hemos cometido errores. Fundamentalmente uno: creer la palabra de Pedro Sánchez», espetó Iglesias, quien recriminó una y otra vez a su homólogo socialista que dijese en La Sexta que tendría problemas para dormir con Podemos en su gobierno , o que se refiriese a ellos como la «extrema izquierda» en la CNN.

«Sánchez ha hecho exactamente lo mismo que habría hecho Susana Díaz –aseveró–. Ha acabado reivindicando el 155 y buscando un acuerdo con “querido o estimado” Albert». Iglesias dio pistas ayer del discurso que mantendrá de aquí al 10-N; un discurso completamente escorado a la izquierda, situando a Sánchez con PP y Cs como socios preferentes, a Errejón como muleta del PSOE y a Podemos como el enemigo a batir por los poderosos. De hecho, Iglesias llegó a referirse a Unidas Podemos como «la pieza de caza mayor» de las elecciones porque, según él, han demostrado que son «los únicos que no pasan por el aro» con las «oligarquías».

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A pesar de este discurso, fuentes del sector anticapitalista lamentaban ayer que el partido haya perdido fuelle con propuestas como el impago de la deuda pública o la nacionalización de las empresas eléctricas.

Pequeña victoria

Con las deserciones y varios socios de Unidas Podemos uniéndose a Más País, Iglesias tuvo ayer un respiro cuando el secretario Político y de Comunicación de Podemos Andalucía, Pablo Pérez Ganfornina , anunció que renunciaban a su propuesta de que en su comunidad hubiese una lista unitaria con el nombre de Adelante Andalucía .

Su intención era aglutinar a todas las fuerzas del «cambio» –incluida Más País– en una candidatura que, después, tuviese su propia voz y espacio en el Congreso como En Comú Podem o Galicia en Común .

Fuentes de Podemos intentaron minimizar la crisis abierta, pero admitieron preocupación por la concurrencia de Errejón el 10-N. Según temen, la derecha puede ser la beneficiada.

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