«Cada vez hay más fondos mirando al sector agroalimentario»

Un informe de PwC para Cesur adelanta las tendencias y ofrece claves de futuro

Enrique Manso, director de Estrategia de PwC, se dirige al público J. M. SERRANO

E. FREIRE

El sector agroalimentario andaluz es el que más ayudas recibe, en términos absolutos, en España, unos apoyos procedentes de la Política Agrícola Común (PAC) europea que, según el consejero de Agricultura de la Junta , «son necesarios» para que siga cumpliendo su función de «integración social y ambiental». Rodrigo Sánchez Haro participó ayer en la presentación en la sede de la Caja Rural del Sur en Sevilla del informe «Claves para la transformación del sector agroalimentario andaluz», elaborado por PwC por encargo de Cesur (la Asociación del Sur de España), que analiza las tendencias y propone palancas para que las empresas dedicadas a esta actividad adquieran ventajas competitivas.

El Brexit traerá una pérdida de fondos para la agricultura y la reducción de las ayudas agrarias

Por su parte, Luis Fernández, socio de PwC y responsable de la consultora en Andalucía , apuntó que el Brexit tendrá un impacto en la nueva PAC a partir del año 2020, ya que el sector agrario perderá fondos tras la salida del Reino Unido de la Unión. «Previsiblemente va a haber una reducción de ayudas muy relevante, lo que va a influir mucho en su evolución», apuntó.

En este marco, el acceso de las empresas agroalimentarias a financiación será clave para que puedan abordar la digitalización o la internacionalización. Así, Enrique Manso, director de Estrategia de PwC y autor del estudio , afirmó que «cada vez hay más fondos de inversión mirando al sector agroalimentrario», lo que apunta a que «va a tener rendimientos más altos» que otras actividades, señaló. Según Manso, los fondos, que ya han tomado algunas posiciones en Andalucía, en sectores como el olivar, «pueden ayudar a financiar los planes del sector, si van con mentalidad de ayudar e invertir», significó.

El estudio de PwC y Cesur sostiene que las empresas agroalimentarias andaluzas deben «prepararse a fondo para afrontar la nueva etapa a la que se va a enfrentar en los próximos años como consecuencia del impacto que la evolución demográfica, la revolución tecnológica o los cambios climáticos y la escasez de recursos van a tener en su actividad».

Este sector genera en la comunidad autónoma más de 180.000 empleos directos y factura por encima de los 11.000 millones de euros, un 25% del total nacional.

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