Las petroleras «no jugamos con los precios de los carburantes», subraya Brufau

El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha salido al paso de las críticas de las que son objeto las petroleras en las últimas semanas por la mínima repercusión que tienen en los precios de los carburantes el desplome de la cotización del crudo y ha dicho las compañías «no jugamos con los precios».

Brufau subraya que las petroleras son «muy responsables» y que «nadie abusa del mercado». Y recuerda que «la mitad del precio de venta al público son impuestos fijos, salvo el IVA, que se lleva el Estado».

Para demostrar su tesis, ha puesto un hipotético ejemplo: «si un barril de petróleo costara hoy 100 dólares, el precio de un litro de gasolina sería de 1,59 euros. Pero si ese mismo barril bajara de pronto a solo 10 dólares, el precio de la gasolina únicamente descendería a 0,91 euros el litro» por los impuestos.

En ese sentido, la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), que aglutina a compañías como Repsol, Cepsa y BP, asegura que «las variaciones en el precio al por mayor de los carburantes se han trasladado en su totalidad al precio antes de impuestos» de la gasolina y el gasóleo.

En una nota explicativa, la asociación de las principales petroleras con operaciones en España asegura que el análisis de la evolución de los precios entre finales de junio y mediados de diciembre muestra «claramente cómo los precios han reflejado el abaratamiento del coste de aprovisionamiento».

El presidente de Repsol añadió que la caída de la cotización del petróleo «tiene un impacto poco relevante» en los resultados de la compañía. «Cada 10 dólares que baja el crudo resta unos 140 millones de euros en las cuentas».