Nadal: «Una vez que me he metido en el partido, todo ha ido más fluido»

Sufrió un inicio inesperado, como si no hubiera salido todavía del vestuario, Sam Querreylo acribilló con un 3-0 sorprendente. El saque, que tanto había funcionado ante Andrey Kuznetsov en la primera ronda, apenas salió en ese encuentro, nocturno y pesado porque la humedad se quedó impregnada en la arcilla. Sin embargo, Rafa Nadal vuelve a transmitir esa sensación de que puede rvertir cualquier situación, sortear cualquier peligro y ponerse en la senda victoriosa en cualquier momento. Sucedió ante el estadounidense. De repente, un click que funcionó en su cabeza y en su raqueta y que volvió loca a la Caja Mágica. Comenzó a salir el saque, la derecha, las carreras. Comenzó Querrey a comprobar que este Nadal es mucho más que auqel al que le robaba un set en cada encuentro.

Y de repente, de la frustración se psó a la euforia. Siete juegos consecutivos y a liderar el encuentro hasta el final. Un pequeño error en el inicio del segundo set le obligó a recuperar un break. Fue solo un susto. A partir de ahí, sin freno hasta la victoria.

«Con jugadores que tienen el potencial tan fuerte a la pelota hay momentos que dependes de ellos. El hecho de jugar de noche, además, que yo no había entrenado todavía han hecho que las sensaciones eran muy distintas, más lentas. En el peloteo del inicio me he sentido extraño, pero he entrenado muy bien y creía que entraría en el partido. Quería evitar lo que ha pasado al principio, pero una vez que se ha pasado ese momento ya he podido hacer los dos breaks consecutivos», explicaba el balear contento con su ronda de cuartos.

Recupera la confianza, sobre todo representada en ese 1-4 y 0-30 que lo ponía al límite: «Cuando vas 4-1 y 0-30 hay dudas, sabes que estás al límite de perder el set, al menos, no el partido porque queda otro set. He decidido restar más atrás para que no viera el servicio tan fácil. Había tocado muchas líneas y a mucha velocidad. Y encima con un drive muy fuerte y con mucho éxito en los tiros. Tenía la confianza de que si me metía en el partido los puntos llevaran a más de tres intercambios. He tenido la suerte de hacerlo y después han ido las cosas fluidas».

también habló de su relación con Novak Djokovic, con el que compartió risas en el Santiago bernabéu viendo el partido del Real Madrid: «Tengo una buena relación con todo el mundo. No he tenido prácticamente problemas con gente, se puede contar con los dedos una mano. La vida es mucho más agradable cuando manteiens una buena relación con la mayor gente posible, y más cuando coincides cada semana. Entiendo que es como tiene que ser. No deja de ser un deporte, un juego. La vida es más importante que todo esto y más agradable si hay una buena relación porque allá donde vas te sientes cómodo».

Sobre su siguiente rival, explicó que lo conoce bien: «Las victorias ayudan a conseguir victorias. Las derrotas ayudan a seguir con derrotas. Nos entrenamos juntos en diciembre en Mallorca. Ha conseguido una gran victoria contra Jack Sock, es un gran jugador en altura. Estará con confianza».