La Philippe Chatrier, cerrada Reuters

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Clima

Ha sido el punto crucial desde el principio de este Roland Garros 2020. El frío, la lluvia y el viento han hecho que las condiciones no sean las mejores para un torneo que se disputa al aire libre. No se indica lluvia en París para esta final Nadal-Djokovic , pero sí temperaturas bajas que pueden condicionar el juego de Nadal, quien siempre prefiere el calor para activar las piernas. Aunque se ha adaptado de maravilla a este torneo otoñal.

Bolas

En relación con el clima, las nuevas pelotas Wilson que se estrenan en París. Más pesadas que las Babolat de otras ediciones, todavía ganan más peso con las condiciones húmedas, más gordas conforme pasan los golpes y más llenas de tierra al contacto con el suelo. Esto hace más difícil que los efectos se noten, algo que podría perjudicar a Nadal porque sus golpes cogerían menos altura y favorecer a priori a Djokovic, pues juega más plano y el harían menos daños los botes altos del español.

Físico

En esta ocasión, los números de uno y otro son parejos, aunque Djokovic ha estado 80 minutos más en pista que Nadal. Y eso que el español ha vuelto a lograr lo que ya hiciera en 2017: no dejarse ningún set. Tres se ha dejado el serbio: uno ante Carreño y dos contra Tsitsipas, que lo obligó a jugar cinco sets cuando ya tenía hasta bola de partido en tres. Además, contra el asturiano indicó que tenía molestias en el hombro y el cuello.

Saque

Es uno de los golpes que más ha mejorado el serbio, aunque anda más bajo de nivel en este Roland Garros. Sin embargo, las condiciones de pista algo más húmedas y parecidas a superficie dura, pueden favorecerlono. Para Nadal, se ha mantenido en un porcentaje del 66 % durante todos los partidos, aunque no ha tenido ningún problema en ser más agresivo desde el inicio para poder tomar la iniciativa del punto.

Números

Aunque las estadísticas no salgan a jugar, siempre es un dato que está en la cabeza de los jugadores. Es Nadal quien ha ganado 6 partidos de siete en Roland Garros, incluidas las finales de 2012 y 2014. Pero es Djokovic quien se llevó el último choque, en los cuartos de final de 2015. Fuera de París, el serbio ganó el último partido, la final de la Copa ATP.

Concentración

Ambos han pasado muchas veces por estas finales. Han compartido 15 en torneos de Grand Slam, pero ambos son humanos y también los nervios pueden hacer aparición. No aprece que vayan a afectarle mucho a Nadal, doce veces en esta situación, y ya con muestras de que puede salir como un ciclón desde el inicio, como hizo contra Diego Schwartzman. Pero sí a Djokovic, que ya le pasó en la final de 2015 contra Stan Wawrinka, después de haber hecho lo más difícil, ganar a Nadal en cuartos. Y también porque en esta edición se le ha visto más alterado después de aquella eliminación en el US Open por un pelotazo a una jueza de línea. No obstante, son 37 victorias en 2020, por solo esa derrota.

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