ENTREVISTA

Miguel Angel León: «Piensas que no hay justicia en el toreo, pero la recompensa llega»

El torero de Gerena tras un tentadero en el campo -ABC

LORENA MUÑOZ

Hace cuatro días que cumplió su sueño y la voz de Miguel Ángel León (Gerena, 1993) todavía transmite la emoción del triunfo. Tomó la alternativa en Valdemorillo el pasado sábado y salió a hombros por la Puerta Grande.

¿Cómo se siente?

Estoy muy contento, fue una tarde de muchas emociones y recuerdos en los que pensé en el sacrificio que llevaba haciendo desde que empecé y era un niño. Tantas noches soñando con ese día y cuando llega lo disfrutas con responsabilidad pero ves que has triunfado. He cumplido el objetivo y me he llevado el premio al triunfador de la feria. No se puede estar más feliz.

¿Era la alternativa que quería?

La idea era tomarla en una plaza con repercusión, que fuera un tampolín. Creo que ha sido la mejor opción tomarla en la primera feria de la temporada. Estamos contentos porque parece que están saliendo bien las cosas.

Su ilusión era tomarla en Sevilla, e inclusó lo manifestó el año pasado.

Sí, mi intención era esa. El año pasado hubo conversaciones y nos dieron ciertas esperanzas pero por los motivos que fueran no se dio. Me hubiese encantado porque es mi plaza y qué voy a decir de Sevilla. Cuando salió que no sentí tristeza y nostalgia.

¿Cómo fue la temporada de 2017?

Al no tomar la alternativa seguí de novillero y sólo toreé un festejo en septiembre, en Navalcarnero. Corté cuatro orejas y de ahí nació la idea de darme la alternativa en Valdemorillo. Fue un año duro, de ver en la prensa que puedes tomar la alternativa en tu tierra con un cartel medio montado y al final todo se cae. Me llamaron de pueblos donde no había dinero para torear pero mis ideas nunca han sido esas. Me sirvió para madurar y sacar la euforia que tenía dentro.

¿Sevilla y Madrid son sus plazas?

Soy sevillano y la Maestranza es mi plaza talismán. Llegué sin caballos cuando no me conocía nadie y fue un año bonito de rivalidad con Lama de Góngora. Debuté con caballos el año siguiente y corté una oreja a la de Fuente Ymbro. Después a una de Villamarta y me presenté en Madrid, que es la plaza que más me ha empujado en mi carrera. Ya estaba con los dos pies fuera del plato y me recondujo de nuevo al camino. Me emociono mucho en Las Ventas, una plaza grandiosa que le ha dado todo a muchos toreros. Me han dado más sitio que en mi tierra. Espero torear muchos años más allí.

Y querrá volver a la Maestranza.

Tarde o temprano espero torear en Sevilla, confío en mí y en mis posibilidades. Sé que voy a venir aunque no sé cuánto tardaré o si me pondrán más o menos problemas.

¿Ha sido el triunfo a la constancia?

Así es desde que empecé: vivir en una constante intriga y pelea ya que siendo el triunfador de muchos sitios, me han querido dejar fuera. Todo es fruto de que nunca he sido apoderado por una casa grande ni por los que están en el monopolio. Ahora me representan Manolo Hurtado y Luis Miguel Martín y antes he ido con las personas que me han ayudado, taurinos de toda la vida. Esa situación la he sufrido.

¿Es mejor no traicionarse?

Siempre he entendido el toreo de esa forma. También he tenido la suerte y el mérito de hacer los esfuerzos en Sevilla y Madrid donde me la he jugado. A veces piensas que en el toreo no hay justicia ni memoria pero si sigues trabajando y luchando, la recompensa llega, como ahora.

¿Ha sonado ya el teléfono para volver a torear?

Gracias a Dios nos han llamado y estamos recibiendo ofertas. Hay que pensar bien las cosas, ir poco a poco. No tengo fecha para vestirme de luces de nuevo pero espero que sea pronto.

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