Las Ventas: imposible torear sin toros

La desesperante flojedad de la corrida de Fermín Bohórquez arruina la tarde

Álvaro Lorenzo, a la verónica Paloma Aguilar

ABC.ES , ABC.ES y Andrés Amorós

Crónica

No se acaban los toros en Madrid con el final de la Feria de San Isidro: Las Ventas es –y debe seguir siendo– una Plaza de temporada. Se anuncia una terna interesante, con tres diestros que han dejado buen cartel. Por desgracia, la desesperante flojera y falta de emoción de los toros de Bohórquez arruinan por completo la corrida, una de las más soporíferas que recuerdo. Una tarde en blanco para todos.

Una vez más, se repite –y con mucha fuerza– el triste diagnóstico: es imposible torear sin toros. Es decir, sin toros con las cualidades que debe tener un toro bravo: casta, fuerza, pujanza, emoción . Sin eso, todo se queda en un sucedáneo, en un espectáculo que no logra mantener la atención del espectador más benévolo. Los sectores exigentes han dirigido sus iras varias veces contra el presidente, que no ha devuelto ningún toro. Comparto la opinión de los primeros y comprendo al último: debía haber devuelto todos.

El malagueño Fortes dejó una excelente impresión con los toros de Pedraza de Yeltes: la negativa a concederle la oreja fue una clara injusticia. Repuesto de sus percances, parece haber encontrado un nuevo camino. El primero anticipa lo que harán todos sus hermanos: no llega a derrumbarse pero es una ruina. A mi lado, Luis busca sinónimos para su examen de Lengua española: es inválido, tullido, caquéctico, anémico, lisiado… Suficiente. Al cuarto apenas le pican –como a todos– pero embiste con tembleque, muy corto, a saltos. De nada sirve que Fortes –que ha brindado a Fandiño , en su aniversario, igual que Lorenzo, el segundo– se quede quieto, acaba sufriendo un desarme. A estas alturas de la tarde, la marea de indignación y aburrimiento ya ha desbordado.

Desde que abrió la Puerta Grande de Las Ventas, se espera al toledano Álvaro Lorenzo . El segundo parece que va a aguantar, embiste con buen ritmo, pero enseguida se viene abajo, igual que la faena. Sólo ha podido lucirse en las verónicas iniciales. El quinto vale aún menos. El trasteo es correcto; se justifica pero, en cuanto le baja la mano, rueda por la arena. Resumen: nada.

Galdós saludó la única ovación de la tarde Paloma Aguilar

El peruano Galdós tiene una estética pinturera. ¿Es suficiente, con toros encastados? Como los de esta tarde no lo son, la incógnita permanece. El tercero repite bondadoso; no se derrumba pero su trote es cansino. El diestro dibuja algunos muletazos con cierto gusto pero que no pueden emocionar. El último, suelto, rebrincado, sin fijeza, pasa por ahí. Galdós no logra entenderse con él y mata mal.

Imitando el título de Gabriel García Márquez , Luis resume: «La muy creíble y triste historia de los toros sin fuerza alguna». Y, antes de que acabe la corrida, huye. No me extraña. La gente habla de todo, menos de los toros. Con estas reses, hasta algunos debates políticos tienen más emoción.

Torear con lucimiento a toros sin fuerza ni casta es tan imposible como contentar a un independentista ofreciéndole federalismo y más dinero, todavía.

Postdata . De José Guirao, nuevo ministro de Cultura, se conocen su experiencia como gestor y su actitud dialogante: es un bombero, no un pirómano. (No de todos los políticos actuales se puede decir lo mismo). Parece claro que no es aficionado a los toros pero que no va a añadir, en ese tema, un nuevo conflicto a los que ya tiene su Ministerio: no le conviene ponerse en contra a cientos de miles de aficionados. Además, como experto en patrimonio, sabe que, por ley, la Fiesta forma parte de nuestro patrimonio cultural inmaterial: eso obliga a respetarla y fomentarla.

Sexto toro

Ligón, número 75, negro bragado meano, de 565 kilos, nacido en diembre de 2013. Asoma por chiqueros con dos cornaditas. Muy deslucido este toro de la desigual corrida de Bohórquez. Pincha y pincha. Silencio. Lo mejor de la tarde, su duración: 1,55. Se lidiaron los seis toros, pero al menos dos debieron de ir para corrales.

Quinto toroSale el altón y grandón

Tortolito, número 74, negro, de 624 kilos, nacido en noviembre de 2013. De "ito" no tiene nada. Álvaro Lorenzo dibuja un racimo de verónicas, con un bonito remate. Quita a la verónica Galdós. Se repite la película de algún capítulo anterior: el toro no tiene mala condición, sino todo lo contrario, pero se desploma cada dos por tres, sobre todo si no hay el entendimiento necesario. Y las raciones de derechazos apenas transmiten. Todo muy espeso y plomizo. Soporífera la tarde. Pincha antes de la estocada. Silencio.

Cuarto toro

Animoso, número 35, negro, de 582 kilos, nacido en noviembre de 2013, un zambombo. Se templa a la verónica Fortes y ve cómo el toro está a punto de pegarse un volatín. Muy flojito también este toro, sin atisbos de mucha casta de primeras. Fortes brinda al cielo, en memoria de Fandiño. Y lo cita desde los medios. Busca la emoción pero entre el material y el crispado ambiente -con razón- es imposible. Molesta mucho el viento. Y pierde la muleta. Se para el bohórquez. Estocada caída. Silencio.

Tercer toro

Vinajero, número 14, negro bragado meano, de 563 kilos. Muy justo de fuerzas también este tercero, con el que Fortes se marca un ajustado quite por gaoneras mientras el personal protesta. Mal en banderillas la cuadrilla. El toro quiere embestir, y lo hace con cierto son por el pitón derecho. Pero carece de la fortaleza necesaria... Una pena, aunque es mejor que sus hermanos. Galdós lo oxigena entre serie y serie. Por el izquierdo se viene más recto, pero también sirve. Algunos muletazos sueltos pero sin llegar a brotar la emoción. El peruano mete la espada con habilidad y entierra una estocada. Saludos.

Segundo toro

Caracol, número 56, negro listón, de 555 kilos, nacido en octubre de 2013. Con un cuello para embestir, Álvaro Lorenzo se luce en el recibo a la verónica. Quita por chicuelinas Joaquín Galdós. Tras una buena lidia en banderillas de Sergio Aguilar, Álvaro Lorenzo brinda al cielo. El toro va con nobleza por la derecha, aunque hay que cuidarlo porque su calidad se sostiene en las fuerzas justas. Por el izquierdo protesta más Caracol. La cosa no toma vuelo con la faena de academia de Lorenzo. Estocada tendida en el rincón. Silencio.

Primer toro

Sátiro, número 80, negro bragado, de 531 kilos, nacido en enero de 2014. Renquea mucho desde la salida y se sostiene con alfileres. Piden con razón la devolución, pero el presidente prefiere guardarse para mejor ocasión el moquero verde. Para colmo, Álvaro Lorenzo hace un quite a tan blando material, aunque logra que no se caiga. Fortes lo cuida a media altura, pero el animal no para de cabecear y no dice nada. No le queda otra al malagueño que abreviar. Pinchazo y media. Silencio.

Paseíllo

Hacen el paseíllo Fortes, de azul marino y plata; Álvaro Lorenzo, de grana y oro, y Galdós, de azul marino y oro. Se guarda un minuto de silencio en memoria de Iván Fandiño.

Sorteo

Esta mañana se han sorteado los toros de Fermín Bohórquez que van a saltar al ruedo a partir de las siete. Los sobreros son de El Torero y Conde de Mayalde.

Cartel

¡Buenas tardes! Bienvenidos a la primera corrida en Las Ventas tras el maratón de San Isidro. Vuelven a Madrid Fortes, tras la oreja que le negó la presidencia; Álvaro Lorenzo, con una Puerta Grande esta temporada, y el peruano Joaquín Galdós.

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