'Vildanza', lo contemporáneo invade el mundo rural

El certamen internacional que se celebra en el pueblo de Vilches lo dirigen los bailarines y coreógrafos, Mario Bermúdez y Catherine Coury de Marcat Dance

El público en el Mirador de la Esperanza en uno de los momentos del festival Vildanza ABC

Marta Carrasco

Vilches es una población de Jaén asentada entre sierras con 4.400 habitantes. Hace seis años dos bailarines de danza contemporánea se asentaron en Vilches, Mario Bermúdez y Catherine Coury. Ambos se habían conocido en Nueva York donde trabajaban. Luego se fueron a bailar a la prestigiosa compañía israelí, Batsheva Dance Company de Tel Aviv, y de repente cambiaron lo urbano por lo rural.

Mario Bermúdez y Catherine Coury decidieron mudarse al pueblo de Mario, Vilches, «donde yo crecí hasta que me fuí a estudiar danza. Íbamos a tener una hija y queríamos mudarnos a algún lugar del mundo, y decidimos que a España, a Madrid o Sevilla, pero al final volvímos a Vilches. Nos encantó el mundo rural y volver a la España vaciada . Nunca nos hemos arrepentido de regresar aunque a veces sentimos la necesidad de museos, galerías..., pero como estamos mucho de gira, esas necesidades culturales las cubrimos en los viajes».

Entretanto, fundaron Marcat Dance, tuvieron dos hijas y han recorrido el mundo con su compañía, «volvimos a Vilches porque teníamos mucha más libertad para tener un gran estudio, poder montar las obras en un teatro».

Las montañas del pueblo, el castillo, la sierra, las vistas de la Sierra de Cazorla, sierra Mágina y el parque de Despeñaperros, han sido la inspiración creativa de ambos coreógrafos, « siempre decíamos, imagínate bailar aquí, traer a nuestros amigos de Nueva York, Israel ..., aquí te sientes cerca de la Naturaleza y se puede unir lo rural con la danza contemporánea y conectar ambos mundos».

El Festival

En plena pandemia nació 'Vildanza' , un festival que este año celebra su segunda edición, «cada noche, en el Mirador de la Esperanza de Vilches, estamos viendo a la vez el espectáculo de la Naturaleza con sus puestas de sol y el espectáculo de los creadores contemporáneos».

Presentaron el proyecto al inicio de su estancia en Vilches, pero el anterior ayuntamiento, «no lo veía. Nos apoyaron en cuanto a instalaciones, pero no el festival. Cambió el ayuntamiento y el nuevo partido que sabían lo que queríamos hacer, decidieron llevarlo en su programa y por fin ha salido el festival. Ya se sabe que en los pueblos deciden más las personas que los partidos. También contamos con el apoyo de la delegación de Turismo de la Diputación de Jaén porque es un proyecto muy certero que une la Naturaleza con la Cultura. En seguida vieron el potencial», reflexiona el coreógrafo.

Mario Bermúdez ha creado obras para compañías tan prestigiosas como la Compañía Nacional de Danza, la Compañía Nacional de Danza de Gales, Eva Yerbabuena, Hung Dance Taiwan y Scapino Ballet Rotterdam, y ha estado nominado en tres ocasiones a los Premios Max.

«Cuando llamamos a los compañeros para venir a 'Vildanza', en seguida respondieron. Pagamos, claro está, pero el caché es justito, porque el presupuesto es el que es. Aún así, conseguimos siempre traer bailarines internacionales que quieren volver porque aquí se les trata con mucho cariño. Esto es un pueblo pequeño, pero cuando llega el festival, el público se entrega . No sabían lo que se iban a ser 'Vildanza', pero al final hubo un encuentro espectacular entre la danza contemporánea y el público».

Este año en el Festival que se celebra los días 23,24 y 25 de junio, participan, además de Marcat Dance, bailarines como «Ya tenemos propuestas para la tercera edición. Hemos creado un público de Danza en Vilches y no hay vuelta atrás», asegura.

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