Foto de la estatua de Pedro Menéndez de Avilés en San Agustín (Florida)
Foto de la estatua de Pedro Menéndez de Avilés en San Agustín (Florida) - Manuel Trillo

Mes de la HispanidadEspaña reivindica su papel en la historia de EE.UU.

Los expertos ven en el Mes de la Hispanidad una ocasión para recordar la labor de los hispanos en el país norteamericano

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Consciente del peso de la cultura latina en la sociedad norteamericana, el expresidente republicano Ronald Reagan proclamó, en 1988, el Mes de la Hispanidad. Un reconocimiento al papel que España y el resto de los países de Iberoamérica desempeñaron en la historia de Estados Unidos y que tiene lugar, cada año, del 15 de septiembre al 15 de agosto.

La celebración de la hispanidad posee una especial relevancia en el caso de España, cuya labor en tierras americanas desde finales del siglo XV acostumbra a ser menospreciada. Una mala imagen global que se ha alimentado de la leyenda negra y que ha sido el objeto de debate del Foro de la Herencia Hispana, una mesa redonda organizada el pasado jueves por The Hispanic Council y Deusto Business School.

Daniel Ureña (i), Borja Cardelús (2i), Manuel Olmedo (2d) y Julio Cañero (d)
Daniel Ureña (i), Borja Cardelús (2i), Manuel Olmedo (2d) y Julio Cañero (d)

El militar andaluz es considerado un héroe de guerra por ayudar a EE.UU. principalmente en la toma de Pensacola (Florida). Una de sus anécdotas más recordadas tuvieron lugar en dicha batalla. Acosado por los cañones de los buques ingleses, que les impedían tomar tierra, Gálvez dio muestra de su coraje y mandó un firme mensaje a sus tropas: «El que tenga honor y valor, que me siga. Yo voy por delante con el Galveztown –su bergantín– para quitarle el miedo».

El voto hispano en la política actual

Iberoamérica sigue siendo una pieza clave de la actualidad estadounidense. Alrededor del 18% de la población es de origen hispano, lo que le confiere un papel relevante a la hora de acudir a las urnas. «Para alcanzar la presidencia, los candidatos deben tener un 35 o un 40% del voto latino», destacó Julio Cañero, y añadió que su presencia en el panorama político «es cada vez más importante».

Los datos así lo demuestran. Un estudio de la fundación Rafael Campalans afirmó que, en las elecciones a la Casa Blanca de 2004, el candidato por el bando republicano George W. Bush no hubiese conseguido la victoria de no ser porque conquistó el 40% del voto latino, algo que el partido republicano no logró cuatro años más tarde, cuando los estados de Nuevo México, Florida, Nevada y Colorado –con más población hispana– se decantaron por el demócrata Barack Obama.

«Los dos partidos mayoritarios han invertido mucho dinero y puesto en marcha sus mejores estrategias para logar conquistar el decisivo voto latino, en especial en estados clave con alta población latina, dado que los candidatos a la presidencia de Estados Unidos necesitaban el voto hispano para llegar a la presidencia», reza el informe.

La reivindicación de España

Los integrantes del coloquio lamentaron que España no ha sabido transmitir sus hazañas a las nuevas generaciones. Labores que no se limitan únicamente a la guerra, sino también a la conservación de su heterogeneidad racial. Buena muestra de ello son las tribus indias, que, afirma Cardelús, consiguieron sobrevivir gracias a que los hispanos «les enseñaron la cultura occidental». Sin embargo «el país no ha vendido esto, no se sabe por qué», sentencia.

Olmedo, por su parte, ensalzó la «magnífica labor del Instituto Cervantes» en todo el mundo, pues ha sido capaz de transmitir con éxito «la cultura y la lengua» a través del cine y la literatura. El problema, apuntó, reside en que se haya podido «combatir la injusta leyenda negra. Es indignante».

Por último, Cañero, más «pesimista», afirmó que cambiar la percepción del pasado es muy difícil en EE.UU., pero reivindicó la importancia de la celebración del Mes de la Hispanidad: «Cualquier acto o conmemoración es importante». Además, avisó de la necesidad de que «nos vean como un país amigo y fiable», y animó a ambos gobiernos a seguir manteniendo buenas relaciones, algo que «ha costado mucho a nivel político».

Ver los comentarios