El Museo de las Ilusiones de Dubái, que con 450 metros cuadrados de superficie es el más grande de este tipo en el mundo, esconde en su interior más de 80 obras de arte clasificadas en tres categorías: Ilusiones maestras, ilusiones grandiosas e ilusiones ópticas. El edificio que lo acoge emula una antigua torre de viento, construcción tradicional árabe precursora del actual aire acondicionado, y se encuentra ubicado en un entresijo de calles estrechas de color arena. «Quienes traspasan nuestras puertas pueden aprender mucho sobre la visión, la percepción del cerebro humano y la ciencia a través de exhibiciones personalizadas que descubren cómo y por qué nuestros ojos ven cosas que el cerebro no comprende», dijo a Efe el propietario del espacio, Mohammed Al Wahaibi. El Museo de las Ilusiones de Dubái es el noveno que se abre en el mundo y reúne el conocimiento de las ciencias, las matemáticas, la biología y la psicología. Por 19 euros (21,9 dólares) se puede uno acercar a estas ilusiones, que provienen de todas las partes del mundo. La sede de Emiratos Árabes también cuenta con el túnel «Vorte», un cilindro giratorio que engaña al cerebro y pone a prueba el equilibrio de las personas que caminan sobre él. Esta es sala «Ames», donde los visitantes encogen o crecen dependiendo de su posición en la habitación. «Dubái es la capital del entretenimiento de Oriente Medio y ofrece numerosas opciones, por eso apostamos por traer este museo aquí, es popular y la gente lo conoce», dijo Al Wahaibi. El nuevo museo es «divertido» y también tiene en cuenta la parte «educativa y cultural», un paraíso para los amantes de la fotografía. Otra de las ilusiones que se puede vivir en este museo experiencial. Una de las obras más populares es el «Clon», que permite al visitante sentarse en una mesa y jugar a las cartas con cinco clones de uno mismo.