Cádiz CF - Levante (PREVIA): Una Copa felizmente rebajada

La Copa vuelve a Carranza. El torneo que dejó más risas, y dinero, el año pasado vuelve este pero con distinto signo. Hoy la Copa se presenta como un aperitivo que ni fú, ni fá. Que sí, que está bien, pero que tampoco se pone en juego algo trascendental para el Cádiz CF. Porque este año, tras el bendito ascenso en Alicante, todo lo que era responsabilidad y presión por pasar de ronda como sea se ha convertido en amable cotidianidad, como aquellas temporadas gloriosas del Cádiz CF en Primera o no hace mucho coincidiendo con la última etapa dorada de los Abraham Paz, Pavoni, Armando y compañía.

Ya no hay urgencias, ya no hay ‘match ball’, ya no hay malas caras si se evaporan los sueños de un cruce ante un equipo que participe en competiciones europeas.

Este año, a diferencia de los seis pasados, el camino hasta ese bombo donde están Barça y Madrid se hace eterno y el desgaste podría ser perjudicial para apenas sacar tajada, para colmo. Se va a competir, claro está, pero se hará desde la precaución y con la vista puesta en el domingo, en el Getafe, en la Liga, que es lo que importa de verdad a un equipo de Segunda A.

Más claro no lo pudo decir Álvaro Cervera en su intervención de ayer. Por tanto, sus jugadores menos habituales serán los que se enfrenten a los suplentes del Levante, que también se tomará la copa rebajada con agua. Por eso mismo, lo que se vea hoy sobre el césped de Carranza puede que sea fácilmente el partido que menos controlado tenga el entrenador del Cádiz CF desde la visita del Racing de Ferrol. Eso, sin contar la segunda parte en Anduva que quedó totalmente descontrolada por un señor con silbato nacido en Alicante. Por eso, con tantos cambios y demás, quien sabe si a Cervera se le va el partido a más de dos goles encajados y su librito acabe arrinconado en una esquina del banquillo. A él, que tan exacto es con sus análisis previos a los partidos (en 'play off' los clavó), se le puede preguntar esta mañana que seguramente contestará con un 'no sé qué decir'.

El hecho de que Cervera tenga que dar descanso al bloque con el que ha empezado la temporada motivará que mucho de lo que se vea esta tarde-noche por parte del once amarillo surja directamente de la improvisación de quienes lo integren. Y eso lo sabe Cervera, el creador de una criatura que ya debe comenzar a madurar en una categoría donde hay que mostrar mucho más de lo mucho que se mostró en ese milagroso ‘play off’ de ascenso. Porque Cervera es el primero en advertir esa idea, pero si aún no se concede licencias en el once será porque no puede permitírselas. Salvo hoy, con ocasión de una Copa ideada para dar minutos a los reservas. Y la esperanza de Cervera descansa en que los nuevos le den razones para confiar en ellos en Liga.

El equipo que pueda salir de inicio hoy ante el recién descendido Levante será el que empieza con Jesús Fernández bajo palos. Juanjo, Aridane, Sankaré y Brian Oliván compondrán la retaguardia. Es posible que Cervera se decante por repetir con Garrido en la medular y verlo funcionar con Abel, que jugaría de mediocentro. Las bandas serán para Nico Hidalgo y Aitor, mientras que Gorka Santamaría y Güiza serían los hombres más adelantados con el vasco algo más retrasado. Esperando su turno en el banquillo y con muchas opciones de contar con minutos estarían Abdullah, Rubén Cruz y Eddy Silvestre.

El bombo quiso que el Cádiz CF ‘ganase’ el sorteo al ahorrarse un viaje entre semana. Hoy no importa tanto el resultado como la imagen y la sensación que puedan dar jugadores que deben ir haciéndose sitio en el once. Es cierto que tampoco estarán hoy Gastón del Castillo, José Mari y que Eddy es posible que no entre en el once por el virus FIFA, pero lo que está deseando el cadismo es que los Nico Hidalgo, Aitor, Abddullah, Sankaré, Rubén Cruz o Gorka Santamaría se ganen el beneficio de la duda. En frente estará un rival de enjundia, por lo que todo lo positivo que se pueda ver hoy pesará más en la moral de una afición orgullosa de su equipo pero consciente de la cantidad de cosas que aún le falta por añadir.