Don Juan Carlos recibe un cariñoso aplauso en el acto conmemorativo de los Seniors Españoles para la Cooperación Técnica. :: JAVIER LIZÓN / EFE
ESPAÑA

El Gobierno aprueba que don Juan Carlos ostente el título de Rey hasta su muerte

Tras la abdicación, sin embargo, su lugar en el orden de preferencia de autoridades retrocederá al quinto puesto, tras la hija menor de Felipe VI

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Consejo de Ministros aprobó ayer un real decreto por el que don Juan Carlos y doña Sofía, una vez se haga efectiva la abdicación, mantendrán hasta su muerte y «con carácter honorífico» el título de Rey y Reina así como el tratamiento oficial de majestades. El título oficial seguirá siendo el de Rey y Reina de España, y solo lo tendrán dentro de una semana Felipe VI y su cónyuge, doña Letizia. La exposición de motivos del real decreto indica que el cambio acordado en la normativa actual «no es sino la forma de plasmar la gratitud (al Rey) por décadas de servicio a España y a los españoles».

La norma modifica el real decreto de Régimen de Títulos, Tratamientos y Honores de la Familia Real y de los Regentes de 1987 que, además de no contemplar situaciones derivadas de una abdicación voluntaria como la presente, solo establecía, como hecho más o menos similar, que el entonces padre del Rey de España, don Juan de Bordón, tendría el título vitalicio de conde de Barcelona y tratamiento de alteza real.

Don Juan Carlos nunca quiso perder el título de Rey pese a su renuncia, por lo que, tras el estudio de precedentes históricos y casos similares en el derecho comparado, los expertos de la Moncloa y la Zarzuela consensuaron esta solución.

La ley aprobada ayer contempla, a su vez, que don Juan Carlos deberá recibir los mismos honores protocolarios y militares que la futura Princesa de Asturias, la infanta Leonor, y que doña Sofía tendrá derecho a honores equivalentes a los previstos para el cónyuge de la heredera de la Corona.

Doña Leonor, que el día 19 amanecerá como Princesa de Asturias, tiene derecho a que las Fuerzas Armadas le rindan honores y el himno nacional en su versión breve, así como con 19 salvas de cañón si es el caso. Son tres salvas menos que el Rey de España, que además escucha el himno en su versión íntegra. El cónyuge del heredero de la Corona, y ahora también la reina Sofía, tienen como honores los mismos que la Príncesa, pero sin salvas. Doña Leonor, según recuerda el real decreto, será también Princesa de Viana y de Gerona, duquesa de Montblanc, condesa de Cervera y señora de Balaguer.

El acuerdo del Consejo de Ministros establece otro cambio relevante. Señala que el orden de preferencia en los actos oficiales de los todavía monarcas una vez se produzca la abdicación será el inmediatamente posterior a la hija menor de los futuros Reyes de España, la infanta Sofía. Es decir, el quinto y sexto lugar, justo anterior a la primera autoridad electa, el presidente del Gobierno.

El evento en el que podría estrenarse el nuevo orden de preferencia sería en el saludo de los nuevos reyes, sus hijas y los anteriores monarcas al pueblo de Madrid desde el balcón del Palacio Real que da a la plaza de Oriente, una hora después de la proclamación de Felipe VI por la Cortes Generales.

Aforamiento consensuado

Otros dos aspectos derivados de la abdicación deberán ser resueltos en las próximas semanas. El primero, la asignación que recibirá don Juan Carlos para su manutención, que deberá ser fijada por su hijo cuando redistribuya la partida que para el sostén de la Casa del Rey recibe de los Presupuestos del Estado.

El segundo, ya lo prepara el Gobierno. Una breve y urgente reforma de la ley del Poder Judicial que otorgará a don Juan Carlos el aforamiento ante el Tribunal Supremo, el único órgano que podrá determinar si admite las potenciales denuncias o pleitos contra su persona. La modificación, que debería estar en vigor antes de final de julio y para la que el Ejecutivo busca tan amplio consenso político como para la abdicación, también podría aforar ante el alto tribunal a la futura reina Letizia, a la reina Sofía, a la Princesa de Asturias, y su futuro cónyuge.

El Gobierno reiteró ayer que, aunque don Juan Carlos pase unas semanas sin aforamiento, fue inviolable como jefe del Estado y lo será en el futuro por los hechos que tuvieron lugar durante su reinado. Don Juan Carlos, entretanto, fue homenajeado ayer con varios minutos de aplausos en su penúltimo acto oficial como Rey, queda la firma de la abdicación, celebrado en el palacio de El Pardo con un grupo de empresarios.