«El ministro es un hacha de las compatibilidades»

Miguel Arias Cañete tiene dos obligaciones, según manifestó ayer el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. La primera de ellas es comparecer en el Congreso para explicar su actividad empresarial mientras que, primero con José María Aznar y ahora con Mariano Rajoy, ha ocupado la cartera de Agricultura. «Cañete es un hacha en materia de compatibilidades», afirmó en tono irónico Rubalcaba, quien aludió así al hecho de que una de las empresas del candidato popular haya mantenido contratos con la Administración mientras él ha ejercido como ministro.

La segunda asignatura pendiente para Arias Cañete es, según el líder socialista, presentar su dimisión como miembro del Gobierno. «No puede ser ministro por la mañana y candidato por la tarde», criticó Rubalcaba. A continuación, recordó que él y Rajoy renunciaron a la vicepresidencia cuando sus partidos los eligieron para encabezar las listas a las generales. «Usa su cargo para inauguraciones de las que se aprovecha electoralmente», se quejó.

En un discurso especialmente duro, tras reunirse con los coordinadores regionales y provinciales de la campaña, el secretario general del PSOE afirmó que -«a diferencia de otros partidos que no quiero señalar»- todos los socialistas participarán en la campaña electoral. Fue una clara referencia a la ausencia de Aznar los mítines populares, ya que el expresidente del Gobierno no participará en ningún acto en apoyo de Arias Cañete. En contraposición, Rubalcaba se felicitó por que al lado de Elena Valenciano estarán los exjefes del Ejecutivo Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero así como futuribles candidatos a las primarias de noviembre, como Patxi López, Carme Chacón o Eduardo Madina, entre otros.