Los empleados públicos afrontarán el cuarto año de congelación salarial

Otro año más de salario congelado. Los trabajadores dependientes de las administraciones públicas asumen a regañadientes la decisión que confirmó el pasado jueves el Gobierno central. En vista de la situación económica, era casi de esperar y existía cierta incertidumbre sobre si se volvería a meter la tijera a los salarios públicos para el próximo año.

En la provincia son 79.103, según el boletín estadístico de personal al servicio de las administraciones públicas de enero de 2012. Por lo tanto, el próximo año será el cuarto año consecutivo de esta crisis en el que los salarios de estos trabajadores no subirán, ya que a las congelaciones de 2011, 2012, 2013 y 2014 habría que sumar el recorte salarial del 5% que aplicó el Gobierno socialista en 2010 y la supresión de la paga extra de Navidad decidida por el Ejecutivo de Mariano Rajoy en 2012.

En la nota de prensa, el Ministerio de Hacienda explicó que la política de contención del gasto público sigue siendo una de las claves para la reducción del déficit durante el 2013, por lo que el proceso de estabilidad presupuestaria sigue teniendo un destacado reflejo en los gastos de personal.

Sin embargo, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, manifestó ayer su más «absoluto rechazo» a la nueva congelación salarial que contemplan los Presupuestos Generales del Estado para el próximo año.

Al CSIF le parece insuficiente el anuncio de que no vayan a tocar las pagas extras. Como explicó el presidente provincial de CSIF Cádiz, Sebastián Alba, no puede considerarse noticia el hecho de que el Ejecutivo vaya a respetar un derecho adquirido y devengado mes a mes por los empleados públicos con su labor diaria. Alba, igualmente, advirtió de que la nueva congelación de la oferta pública de empleo tendrá efectos muy negativos, dado que se elevará la carga de trabajo (especialmente en sectores sensibles como prisiones, la sanidad o la enseñanza) y por extensión se agravará el deterioro de los servicios públicos que reciben los ciudadanos.

Si el Gobierno no aumenta la tasa de reposición, las administraciones «se verán abocadas a corto medio plazo al colapso o a la privatización», alertó. Para el CSIF, sindicato más representativo en las administraciones públicas, lamentablemente, los presupuestos del Gobierno no suponen ninguna sorpresa, lamentó.