Los vecinos del centro, atemorizados por una oleada de robos y actos vandálicos

Los vecinos de la zona del centro, en concreto de las calles aledañas a la plaza Mayor, han emprendido una campaña de recogida de firmas para pedir al Gobierno municipal que intensifique la vigilancia en toda esta zona. El motivo es que, según aseguran, en los últimos veinte días se han producido entre diez y quince robos en la zona. Aunque también señalan que es una situación que se viene produciendo desde hace un año.

Los vecinos viven con temor, lo demuestran las conversaciones en algunos establecimientos de la zona, donde unos y otros comparten palabras sobre el tema y, la mayoría, teme abrir las ventanas de su casa o dejar cerrada la puerta sin llave. Otros, incluso, han tenido que dejar sus vacaciones en el campo para volverse a la casa del centro y no tenerla deshabitada. Ninguno de los que han hablado para este medio han querido identificarse, por más miedo.

El último tema que se cuela en las conversaciones es el robo que sufrió una señora de unos 80 años de edad en la calle Álamo. Una vecina relata que llamaron al telefonillo «y al asomarse la mujer por la ventanita para ver quién era, le dieron un tirón para arrancarle la cadena que llevaba puesta».

Robos, intimidación y 'trapicheo'

Pero los tirones no son el único método de robo que denuncian los ciudadanos que residen en esta parte del centro. Aseguran que se producen delitos de este tipo en negocios, en casas, y en la misma calle. «Muchas veces esta gente intimida a los peatones para pedirles dinero o tabaco», detallan, añadiendo que en otras ocasiones «han llegado a amenazar a gente» y también cuando están en la plaza Mayor «están siempre tanteando a quién pueden molestar».

De los negocios de la zona, pocos se han salvado, o han entrado una o más veces y han robado, o al menos lo han intentado. Desde peluquerías, a bares, pasando por tiendas de alimentación o kioscos de golosinas. Los locales vacíos del edificio de la plaza Mayor tampoco han salido indemnes. Las puertas, según aseguran los vecinos, «las han tenido que poner todas nuevas y atornillarlas o ponerles candados».

Los robos han alcanzado hasta la Iglesia Mayor, donde comentan que han entrado en varias ocasiones «han robado dinero, rompieron la entrada adaptada para discapacitados y una vez intentaron quemar hasta la puerta».

Además de los hurtos, algunos vecinos manifestaron haber visto como estos individuos «esconden por la zona de la plaza Mayor los objetos que roban de otras casas». Y en su la lista de acciones se suman otras como la ocupación de viviendas vacías, el destrozo de mobiliario urbano, pintadas y compraventa de droga. Todo ello, manifiesta la gente del lugar, «a plena luz del día».

Piden soluciones

Los afectados por esta situación reconocen que la gente de la zona «sabe quienes se dedican a todo esto». Los identificaron como un grupo de unos diez jóvenes, algunos menores de edad, y otros de procedencia marroquí. «Tenemos miedo porque ellos saben que nosotros conocemos quiénes son y son frecuentes las amenazas».

Ante esta situación, los ciudadanos de esta zona de la ciudad expresan que la Policía Local y la Guardia Civil «viene cuando la avisamos pero muchas veces no pueden hacer nada, hay otras veces que ni vienen». Por eso, además de la recogida de firmas, varios de ellos afirmaron que piensan reunirse con el alcalde para darle a conocer los hechos «porque muchos concejales ni saben lo que aquí está pasando».

Los vecinos insistieron en que se trata de una situación que se está viviendo en pleno centro de Chiclana y exigieron soluciones. «No podemos esperar a que entren en un casa y se carguen a alguien o que a algunos de los que se quedan a veces por la plaza drogados se le cruce los cables», expresaron para manifestar la necesidad que tiene el barrio de salir de esta situación.