Aguayo, Díaz y Valderas, fotografiados en el Parlamento, en el reciente periodo de sesiones. :: SUR
ANDALUCÍA

PSOE e IU consensúan el próximo Presupuesto andaluz sin escollos

La negociación de los socios de Gobierno avanza y se abordará una posible nueva reducción de empresas públicas

SEVILLA. Actualizado: Guardar
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Los Presupuestos de Andalucía 2014 se cuecen en el despacho de la consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, y avanzan con el acuerdo de los socios de Gobierno de Izquierda Unida. La estabilidad del pacto entre las dos formaciones políticas, que inquieta a todos por igual en los partidos que forman el ejecutivo y en la oposición, parece asegurada. El horizonte de las elecciones anticipadas, pues, no parece ahora mismo cercano.

La futura presidenta de la Junta y actual consejera de Presidencia e Igualdad, Susana Díaz, confirmó ayer este clima de acuerdo y se reunió con el vicepresidente de la Junta y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas (IULV-CA), para cerrar el marco general de las cuentas públicas. No obstante, aún hay margen para elaborarlas hasta noviembre. Además Andalucía debe esperar a que el Gobierno central presente sus propias cifras.

Hacienda ha trabajado durante el mes de agosto en la definición de las diversas partidas, después de que el 31 de julio se reuniera el Consejo de Política Fiscal y Financiera para fijar el objetivo de déficit y dar a conocer las entregas a cuenta. La consejera ha permanecido en su despacho durante buena parte del mes, con vacaciones ocasionales, a pesar de que su permanencia en el futuro Gobierno no está asegurada.

De hecho, la continuidad o no de Martínez Aguayo es una de las cuestiones más candentes de cara a la composición del futuro Gobierno. Aguayo es pieza clave en este Gabinete, miembro destacado del equipo de Griñán, leal colaboradora desde su etapa como ministro de Sanidad y mantiene una provechosa vía de entendimiento con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que ha sido de gran eficacia para resolver conflictos de envergadura, como la liquidez procedente del FLA o la relajación del objetivo de déficit. Díaz ha valorado su «intenso trabajo» y ha dicho que «está siendo una pieza fundamental para que el presupuesto al final sea factible».

En contra de su continuidad figuraría, en primer lugar, la posibilidad de que la jueza Alaya decida elevar suplicatorio dentro de la instrucción por los ERE fraudulentos, dado que es parlamentaria andaluza por Sevilla, pero también el deseo de la propia consejera de abandonar sus actuales funciones.

Ahora toca comenzar a asignar las partidas por consejerías y repartir el esfuerzo. El Gobierno andaluz parece decidido a dar una vuelta de tuerca a las empresas públicas, una petición de sus socios de IU, en busca de un mayor ahorro, a partir de un análisis en profundidad que detecte nuevas zonas excedentes, más allá del recorte que ya se realizó en el ejercicio pasado, impuesto por el Ministerio de Hacienda, como ya adelantó este periódico.

No obstante, la consigna política se mantiene en preservar la sanidad, educación y servicios sociales y en mantener el empleo como principal objetivo. Ayer mismo la titular de Salud, María Jesús Montero, indicaba en rueda de Prensa que espera mantener el presupuesto del año anterior.

En declaraciones a Europa Press, Susana Díaz insistido en calificar a los próximos presupuestos de "difíciles y complicados", debido al «reparto injusto» del objetivo de déficit en 2014, y mantuvo que "hay que poner todos los instrumentos al servicio de la creación de empleo. «No me resigno a que en Andalucía tengamos esta tasa insoportable de desempleo», dijo.

Díaz cree que este acuerdo con sus socios de IU «es la primera prueba de esa estabilidad que ambas fuerzas políticas defendemos y creemos necesaria en estos momentos en Andalucía, dentro de la «voluntad clara» de agotar la legislatura. Por su parte Diego Valderas confirmó tras la reunión el clima de acuerdo entre ambas fuerzas y dijo que «van a ser unos presupuestos de resistencia y de unidad, en los que el rostro humano será evidente».