Estas imágenes muestran en qué condiciones viajan los sin papeles. :: LA VOZ
CÁDIZ

La proliferación de lanchas de juguetes dispara el riesgo de naufragios

El 69% de los inmigrantes que llegaron al país lo hicieron en patera y un 16% trató de hacerlo en barquitas hinchables

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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El Ministerio del Interior calcula que la inmigración irregular ha bajado un 30% en el último año, pero este porcentaje es una media de los datos obtenidos en las distintas puertas de entrada al país: Canarias, península, Ceuta y Melilla. Sin embargo, esa tendencia general no se corresponde con los datos relativos a un área específica como el Estrecho.

La APDHA confirmaba el dato que ya se barruntaba en los últimos meses del año, cuando se vivían jornadas diarias de rescate en el mar. Así, de los 3.318 inmigrantes que lograron cruzar la frontera sur y alcanzar el territorio nacional en 2012, 1.310 lo hicieron por la provincia de Cádiz; si bien, esta zona sigue siendo menos explotada por las redes mafiosas que Andalucía Oriental, donde comenzaron a desviarse las rutas tras implantarse el sistema SIVE en la costa gaditana y se reforzaran los medios de vigilancia en Canarias.

La comparativa con respecto al año anterior confirman no sólo el repunte del fenómeno de la inmigración irregular por el pasillo marítimo sino también cómo los conflictos en África Occidental comenzaban ya a notarse a miles de kilómetros. Así, al cierre de 2012 se había triplicado el número de inmigrantes que alcanzaron España por la provincia de Cádiz.

El 69% de estos inmigrantes emprendieron la travesía en patera y más del 15% en barquitas hinchable de juguete. El uso de estas embarcaciones de reducidas dimensiones y que no están preparadas para la navegación en alta mar y, por supuesto, en una zona de fuertes corrientes como el Estrecho, se está generalizando; lo que está propiciando que aumente la peligrosidad y el riesgo de naufragio.

Ya el año pasado, en el mes de noviembre, se produjo el naufragio de una lancha hinchable. Como todo lo que ocurre dentro del fenómeno de la inmigración clandestina, no se sabe con plena seguridad si fue el último del año o no. En este caso, el accidente se descubrió cuando un barco avistó una lancha sin ocupantes. Otro mercante rescató a dos varones que aseguraron que viajaban con tres personas más. Sin embargo, Salvamento Marítimo, que llegó a suspender la búsqueda al dar por imposible que apareciera ningún cadáver, recuperó al día siguiente uno de los cuerpos, que apareció cerca de la zona del naufragio, a unas pocas millas de Tarifa.