María Izquierdo Rojo (PSOE, Granada). :: LAS CONSTITUYENTES
ANDALUCÍA

Nostalgia del consenso

Cinco andaluzas participaron en la legislatura que dio luz a la Constitución hace 34 años

SEVILLA. Actualizado: Guardar
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Cinco mujeres andaluzas formaron parte de las Cortes que elaboraron la Constitución de 1978. Ahora, 34 años después, tienen su propio relato de los hechos y mucha luz que arrojar sobre un presente confuso. Virtudes Castro (PSOE) por Almería, Soledad Becerril (UCD) y Ana María Ruiz-Tagle (PSOE), por Sevilla y Mercedes Moll (UCD) y María Izquierdo (PSOE) por Granada participaron junto con otras 22 diputadas y senadoras en una aventura política que merece la pena revisar hoy, en el aniversario de su promulgación.

Las «madres» de la Constitución de la democracia añoran, en general, el espíritu de consenso que alumbró aquella Ley de Leyes. Es la primera lección que sacan de este aniversario, en el que su voz se comienza a oir gracias al premiado documental 'Las constituyentes', de Oliva Acosta, un brillante ejercicio de memoria a punto de llegar a las salas andaluzas.

De su experiencia se desprende una mirada en perspectiva de estos momentos de depresión. Hemos avanzado mucho: «Estos son tiempos difíciles, sin duda, pero menos que los de entonces, esa España en blanco y negro que salía del franquismo, cuando la cifra de paro alcanzaba el 26%, más que ahora», dice Ana María Ruiz-Tagle. La historia nos enseña, pues, que «estamos mal, pero podremos salir adelante».

Avances históricos

Muchos fueron sus logros en aquella Legislatura. Mercedes Moll (UCD) planteó por primera vez las pensiones a los militares republicanos y a sus viudas. Ella misma era viuda, tenía 4 hijos pequeños y al término del mandato volvió a su vida privada y se mantuvo muy activa en el trabajo social y empresarial, como primera mujer que perteneció a una Cámara de Comercio en Andalucía. También fue ponente en los artículos contra la tortura y la pena de muerte, trabajó en la despenalización de la anticoncepción y comenzó a hablar de la incorporación de la mujer a las Fuerzas Armadas.

María Izquierdo (PSOE), que presidió la Comisión de Educación, planteó la amnistía de los maestros republicanos, depurados, sin sueldo ni pensión. Le llevó tres o cuatro años conseguirlo: «Fue el ministro Clavero quien, cansado ya de mi insistencia, lo aprobó».

También colaboró en la redacción del artículo 9, respecto a la necesidad de que el Estado garantice que no se discrimine a las mujeres, «incluso con acciones positivas». De modo que «ahí está la semilla de las políticas de igualdad, la paridad, etc».

En el artículo 9 trabajó también Ana María Ruiz-Tagle (PSOE), que dice con humor que es la «madre» del párrafo segundo, gracias al cual se alumbró en 2007 la Ley de Igualdad. Ruiz-Tagle fue además la autora de la Ley de Protección al Paro, que daría lugar a los Pactos de la Moncloa.

Virtudes Castro perteneció a la comisión de Peticiones y colaboró en los debates acerca de la ordenación del territorio en comunidades autónomas, «para cumplir con el deseo de muchos que llevaban años reivindicando su historia», Andalucía entre ellos, cita.

Reformas

Aunque coinciden en sus muchos valores, a ninguna de las constituyentes andaluzas les da miedo reformar la Constitución. Virtudes Castro es partidaria de pocos retoques, todo lo más la sucesión de la Corona, «porque no entendíamos ya entonces que se dijera que nadie sería discriminado por razón de sexo y luego se relegara a la mujer como heredera del trono». Coincide con ella María Izquierdo, que detecta otra carencia: «No se habla de la Unión Europea». Mercedes Moll cree que debe cambiarse el sistema electoral, para que varíe la confección de las listas, porque «la política es un tiempo de servicio, no una forma de vida».

Ana Ruiz-Tagle mejoraría el artículo 16, para avanzar en el laicismo del Estado, pero todas aceptan que el caballo de batalla está en el Título VIII. Aunque coinciden en que fue fundamental para la democracia y «dio mucha estabilidad», dice Ruiz-Tagle, ahora «hay que hacer una definición más adaptada a la realidad, que avance hacia un Estado federal según el modelo alemán, siempre según los principios de solidaridad, corresponsabilidad e igualdad». Mercedes Moll es más crítica con el desarrollo del título, que ha llevado a «reinos de taifas».

Eso sí, para cualquier reforma hace falta revivir aquel espíritu de consenso. María Izquierdo lo dice con palabras claras: «El eje de la Constitución de 1978 fue el consenso, la capacidad de dos fuerzas mayoritarias, UCD y PSOE entonces, de dejar aparcado lo que les diferenciaba y construir la democracia sobre puntos comunes. Ese eje es el que ahora tiene más actualidad. Con la crisis resulta aún más necesario lograrlo, para construir el inmediato futuro sobre aspectos que nos unen». «Muchos de los problemas que tenemos se habrían evitado si se hubiesen hecho buenas leyes consensuadas por todos», afirma Virtudes Castro.

También creen que en la discusión sobre nuevo modelo del Estado debe oirse la voz de Andalucía y recuerdan su papel, desde el 28-F: «Andalucía fue clave para que se garantizara la solidaridad entre las distintas comunidades autónomas, para que todas tuvieran la misma dignidad, aunque cada una sienta su identidad de una manera», dice María Izquierdo. Es fundamental un reparto equitativo de financiación: "En el Consejo de Política Fiscal y Financiera se pueden elaborar ponderaciones que satisfagan a todos..si hay dinero, claro".

Soledad Becerril, entonces diputada de UCD y ahora Defensora del Pueblo, con quien fue imposible hablar para este reportaje, dice en el documental que «el gran éxito de la transición española fue pensar a medio y largo plazo». Recuerda que «había que desmontar todo un sistema y sustituirlo, sin vacío, por otro», sin más salida que la democracia. «En esa atmósfera se produjo la gran reconciliación y yo creo que eso debe durar mucho, mucho tiempo».