UN AÑO SIN GRANDES ALEGRÍAS

Los últimos coletazos de 2011 ya están aquí y el año se marcha sin demasiadas alegrías para los clubes gaditanos. Los 'premios gordos' fueron a parar al Campo de Gibraltar, donde vivieron dos ascensos. Uno de ellos servía para colocar a la Balona en Segunda B, categoría a la que se ha adaptado a las mil maravillas. El otro fue a parar a la vecina San Roque. Allí también se vivió un ascenso (en este caso a Tercera). Sin embargo, no fueron tan bien las cosas en Algeciras, ya que el club albirrojo se quedó a un paso de disputar el 'play off' de ascenso a Segunda B.

Casi la misma sensación que en el Nuevo Mirador se experimentó en el Carranza. Bien es cierto que el Cádiz sí disputó la fase de ascenso a Segunda División, pero lo hizo con más pena que gloria. El varapalo de Anduva ha pasado a formar parte de la leyenda negra del cadismo, aunque ese amargo sabor se ha ido aliviando con la ilusionante llegada de Quique Pina y los nuevos fichajes al club, el provisional liderato y el buen papel en la Copa del Rey.

En Jerez tampoco fue un año para el recuerdo. El Xerez no acabó la pasada Liga para tirar cohetes y en el presente ejercicio busca la estabilidad, tras el adiós de Merino y la llegada de Vicente Moreno al banquillo. Eso sí, bastante peor le fue al Jerez Industrial, que concluyó mal su etapa en Tercera.

San Fernando y Racing Portuense tampoco pueden lanzar las campanas al vuelo. Los isleños, que han cesado a Menudo, se quedaron a un paso de retornar a Segunda B al caer en la última eliminatoria ante La Roda. Asimismo, los racinguistas se desfondaron al final de la pasada campaña y actualmente están en zona de descenso a Primera Andaluza y con problemas económicos.

Es cierto que el Conil mantuvo su plaza en Tercera el año de su retorno, que el Sanluqueño ilusiona en el tramo final de 2011 o que el Arcos vuelve a jugar en el Grupo X ocupando la plaza del Puerto Real. El balance podría ser más positivo en una provincia con un potencial futbolístico notorio. Esperemos que 2012 esté repleto de éxitos.