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Rueda, la clave de Merino

«En el Barcelona siempre jugábamos con este sistema y me encuentro muy cómodo», reconoce el azulino El técnico prueba el 4-3-3 ante el filial con el jienense como cerebro del Xerez

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Merino lo sopesaba, pero ayer lo confirmó. El técnico del Xerez quiere buscarle una solución que dé fluidez al equipo, algo que no se ha conseguido en los cinco partidos de Liga disputados hasta el momento, y la primera opción pasa por un cambio del sistema de juego que haría variar el 4-4-2 empleado hasta el momento por un 4-3-3 como el que ayer probó en el partidillo que enfrentó a la escuadra azulina con un combinado de jugadores del Xerez B y el equipo juvenil. En dicho partido, Merino apostó por un trivote en el centro del campo formado por Barber, Capi y Rueda. Precisamente el de Andújar sería el cerebro junto a Barber, aunque, de momento, el jugador ni tan siquiera se ve de titular ante el Girona, a pesar de que el entrenador del Deportivo no podrá contar con Miguel Ángel Cordero: «El míster será el que decida y él sabrá si debo jugar desde el principio o no. Yo la verdad es que en cuanto me diga que salga al terreno de juego voy a intentar hacerlo lo mejor posible y aportar al equipo lo máximo».

De todas formas, Rueda ve con buenos ojos un cambio en el esquema de juego, destacando que es bueno «tener varias opciones», ya que «el cambio de sistema a algunos nos puede beneficiar. No se sabe si durante el partido nos va a venir bien jugar un 4-4-2 o un 4-3-3, pero es bueno tener muchas opciones». Lo que tiene claro el de Andújar es que «en la carrera que tuve en el Barcelona casi siempre jugábamos con un 4-3-3 como sistema, por lo que me siento bastante cómodo en ese sistema de juego, pero también es verdad que con el 4-4-2 del día del Córdoba también me sentí cómodo a pesar de no haber jugador nunca así». Aún así, Rueda no quiere ni quitar ni ponerse responsabilidades, aclarando que «hay compañeros muy buenos que también pueden hacer esa labor de creación, pero todo es cuestión de ayudarnos unos a otros, ya después el míster decidirá quién juega». Eso sí, la figura del típico creador de juego de la Masía le viene que ni al pelo al azulino: «Me he llevado muchos años jugando en esa posición, así que por qué no». Una responsabilidad añadida que no le quita el sueño al andaluz, ya que «esa presión para un futbolista, si no existe, raro es. Siempre digo que hay que hacer lo mejor en cada partido y darle a la afición lo mejor, y eso supone ganar siempre».

Para ello, el jugador ha dejado atrás unas molestias que preocuparon el miércoles a Juan Merino. El jugador se retiró del entrenamiento por una sobrecarga, aunque ayer aclaraba que fueron «unas molestias en el abductor, pero no quería correr riesgos ni nada, y como los entrenamientos son diferentes al ritmo de partido, pues por precaución decidí retirarme antes de tiempo». De hecho, el centrocampista participó en la jornada de ayer en el entrenamiento del primer equipo con total normalidad, destacando que «no hay ningún problema».

Y es que Rueda muestra ganas de jugar ante el Girona, un encuentro que define como «complicado»: «Viene de ganar a Las Palmas con un contundente 4-2 y vendrá con la moral bastante alta, pero se va a encontrar un Xerez muy fuerte en casa, con ganas de ganar y se lo vamos a poner lo más difícil posible».

Buen estreno

Sobre su estreno como azulino este pasado fin de semana en Córdoba, el de Andújar señalaba que se encontraba «muy contento, acabé el partido con muy buenas sensaciones, ya que llevaba desde el mes de mayo sin jugar ningún partido, y después de tres semanas de entrenamientos con los compañeros me sentí con muchas ganas de disputar el primer partido con el Xerez». Eso sí, el jienense aclara que «por una parte no fue un muy buen estreno por el resultado, ya que salimos perdiendo de Córdoba, pero dentro de lo malo uno tiene que ir cogiendo cosas positivas y la verdad es que acabé muy contento». Pero ahora toca pensar en el encuentro del lunes ante el Girona, en el que Rueda esperar lograr el primer triunfo en Chapín: «Ganar toca todos los fines de semana, lo que pasa es que en casa hay que salir enchufado desde el primer minuto y ganar el encuentro para quitarnos el mal sabor de boca de la última derrota».