El 'efecto Almagro' se lleva por delante al último reducto del 'pizarrismo' en la Junta

El organigrama de la Consejería de Gobernación y Justicia ha sido el escenario sobre el que se ha representado la caída del 'pizarrismo'. La dimisión del histórico socialista alcalaíno, a raíz de la destitución del delgado del Gobierno en Cádiz, Gabriel Almagro, ha puesto en marcha una cadena en la que casi todos los engranajes tienen apellido gaditano.

Desde luego, si como muchos mantienen, la intención de José Antonio Griñán era quitarse de en medio al último reducto del Gobierno de Chaves en su Ejecutivo, lo ha conseguido. Eliminando a la cabeza visible del sector más crítico con el presidente de la Junta, el PSOE regional ha perdido también de vista a su mano derecha, a la izquierda y hasta a un pie, porque ayer mismo presentaron su dimisión ante el nuevo consejero de Gobernación y Justicia, Francisco Menacho, los tres hombres de confianza de Pizarro, tres políticos gaditanos a los que el de Alcalá fichó para su equipo de Sevilla: José Antonio Gómez Periñán, José María Reguera y Manuel Brenes.

El primero de ellos presentó su dimisión al propio Francisco Menacho inmediatamente después de que este tomase posesión de su cargo en la mañana de ayer. Los motivos no han trascendido, aunque es de suponer que su lealtad hacia Pizarro le haya llevado a tomar esta decisión. Hay que recordar que Gómez Periñán fue nombrado viceconsejero de Gobernación y Justicia en abril de 2009, después de haber ejercido como delegado del Gobierno andaluz en la provincia de Cádiz durante nueve años. A su marcha fue sustituido por Gabriel Almagro.

En el caso de José María Reguera, su llegada a la Consejería se produjo hace un año, donde pasó a ocupar la Dirección General de Administración Local. Antes de llegar a Sevilla, ocupaba el cargo de delegado provincial de Turismo, Comercio y Deporte, puesto que asumió en 2007.

El tercer socialista gaditano que abandona la capital andaluza es el exdelegado provincial de Educación, Manuel Brenes. Su cargo como director general de Espectáculos Públicos y Juego de la Junta de Andalucía apenas le ha durado un año.

Resulta llamativo que ninguno de ellos haya apostado por seguir trabajando con otro socialista gaditano como Francisco Menacho.